Mejorar la accesibilidad en las viviendas de las personas mayores
Los mayores son una parte muy importante en la sociedad actual y cada vez más numerosa. Su presencia será aún más relevante en un futuro próximo debido al aumento de la esperanza de vida. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a nivel mundial, y del Instituto Nacional de Estadística (INE) a nivel nacional, en el año 2050 más de la cuarta parte de la población mundial estará formada por personas mayores de 60 años. En España, concretamente, pasaremos del 18% actual a un 36% de mayores de 60 años para 2050.
En este contexto, la empresa ThyssenKrupp Encasa, según su experiencia en el ámbito de la accesibilidad, propone algunas de las claves a tener en cuenta en el hogar de una persona mayor, cuya movilidad y facultades pueden verse reducidas con el paso del tiempo. Nuestras viviendas tienen que cumplir unas condiciones de accesibilidad, comodidad y seguridad para que siempre podamos seguir disfrutando de nuestra casa y nuestro entorno plenamente.
Accesibilidad entre diferentes alturas. Actualmente, existen en España cientos de miles de edificios de dos a cuatro plantas sin ascensor o elevador. Muchos de estos pisos situados en pueblos, centros urbanos o barrios periféricos, en la actualidad sólo cuentan con una escalera para que sus propietarios, en su mayoría personas de avanzada edad, accedan a sus viviendas. En este sentido Belén Galán, responsable de Marketing y Comunicación de ThyssenKrupp Encasa, informa sobre: “La idoneidad de instalar una solución salvaescaleras o un elevador vertical, para que los propietarios de estos edificios, en su mayoría personas mayores, puedan entrar y salir de su vivienda, evitando así el sedentarismo en el hogar y la libertad de movimiento”.
La adaptación de las personas mayores a las nuevas tecnologías de la información y comunicación. La integración de la tercera edad en las TICs es imprescindible para asegurar su participación de una manera activa en la sociedad del siglo XXI. Sentirse incluido y utilizar las nuevas tecnologías, haciendolas parte de sus hábitos diarios es un estímulo para los mayores. Para ello es clave potenciar el uso de las TICs, a través de una buena conexión de internet en las viviendas, en dispositivos móviles y tabletas, que permitan realizar actividades presentes en la vida cotidiana, como pedir hora al médico, gestiones bancarias, ver opciones de ocio e incluso contactar de forma rápida y económica con familiares o amigos en el extranjero. Actualmente las nuevas tecnologías permiten multitud de usos, que rompen con el aislamiento en el hogar y potencian la creación de lazos fuera de éste.