Grandes y pequeños, juntos: el todo es mayor que la suma de las partes
¿Alguna vez se ha preguntado por qué a la gente le gustan las cosas grandes? Quizás es que nos gusta impresionar. El mundo de la impresión digital lleva años impresionándonos a muchos de nosotros con un rendimiento cada vez mayor, más colores y tamaños más grandes. La idea de que cada impreso puede ser diferente ha sido una de las incorporaciones más atractivas que ha traído consigo la impresión digital. En realidad, la tecnología digital ha impulsado una verdadera revolución en el sector, que ha avanzado mucho desde Guttenberg e incluso desde que el proceso offset dominaba el panorama en el siglo pasado, gracias a la llegada de nuevas capacidades en el ámbito de la impresión digital basada en tóner. En la actualidad, las nuevas tecnologías inkjet están impulsando la impresión digital hacia nuevas cotas.
Muchos de los proveedores convencionales del sector gráfico han abandonado el barco o bien han adoptado las nuevas tecnologías digitales. Pero su herencia les ha llevado a abordar estas nuevas tecnologías con los procesos convencionales siempre en el horizonte. El pensamiento creativo nunca fue el objetivo; el objetivo era encontrar sustitutos a tecnologías anticuadas, reduciendo los químicos y el tiempo necesarios para producir las planchas de impresión. En efecto, han adoptado las tecnologías digitales como forma de proteger su parte del volumen de impresión global, que está migrando paulatinamente a las tecnologías digitales, ya sea con o sin su participación.
¿Cuál es, entonces, el siguiente paso para la impresión? La amplia distribución de estos nuevos sistemas ha ayudado al cliente a entender que los ciclos han dejado de ser un problema. Los plazos de entrega son más ágiles y los resultados que se obtienen son de alta calidad. No obstante, hay muchas empresas de serigrafía que todavía no han adoptado métodos de producción digital. Ello se debe principalmente al precio de la inversión en equipos, o a su falta de conocimientos sobre el modelo de negocio digital. Pero todo esto está cambiando con el creciente número de impresoras inkjet LED-UV planas disponibles en el mercado. Ofrecen oportunidades casi ilimitadas, y se tarda menos en producir tiradas cortas que el tiempo que supone crear las tramas usando tecnologías antiguas. Además, las tecnologías digitales no requieren químicos nocivos ni implican tediosas puestas a punto ni limpiezas entre trabajos. Si la calidad y la velocidad del proceso digital llegan a superar los de la serigrafía, y si las cantidades de pedidos digitales siguen aumentando, creemos que la señal de alarma para la serigrafía es evidente, del mismo modo que lleva siéndolo desde hace tiempo para el offset. Ninguna de estas dos tecnologías desaparecerá por completo, pero su importancia se reducirá drásticamente. Los proveedores de servicios de impresión que trabajen en estos segmentos deben, sin duda alguna, dar el salto e invertir en tecnologías digitales, si es que aún no lo han hecho. Es cuestión de supervivencia.
En Mimaki hemos logrado producir una solución digital asequible que puede ayudar a las empresas de serigrafía a migrar a la tecnología digital. Nuestra impresora plana de pequeño formato, con un tamaño de 250x130 cm, es la solución ideal para sustituir una gran parte de la producción serigráfica. El uso de una impresora a todo color no implica problemas de registro, y desaparece la necesidad de rasterizar una lineatura de trama de 60 líneas. Tenemos hasta impresión de tonos continuos con el mismo tamaño de la serigrafía. Y no solo eso, también hemos logrado eliminar todos los químicos, de modo que los operarios tienen un espacio de trabajo limpio y sostenible. No hay tinta en el suelo, no hay que limpiar pantallas, y el espacio necesario para almacenarlas se puede emplear para otros fines. Actualmente es posible imprimir bajo demanda lo que el cliente necesita. Sin complicaciones.
Pero eso no es todo. La buena noticia es que también es posible combinar ambas tecnologías en un modelo híbrido, del mismo modo que ocurre en el mundo del offset. Imagine mantener la serigrafía para la preimpresión y el proceso digital para la impresión. De este modo ahorraría tiempo y dinero. Un buen ejemplo podrían ser los pósteres para supermercados. El logotipo y el fondo se pueden imprimir en grandes volúmenes mediante serigrafía, y se puede sobreimprimir digitalmente con tinta blanca LED-UV para destacar los productos rebajados de la semana. De esta forma se obtiene la cantidad de pósteres exacta sin necesidad de cambiar pantallas. Mejora drásticamente el modelo de costes y acorta los ciclos. Los márgenes aumentan y mejora la fidelidad de los clientes. Además, tanto el impresor como el cliente, tienen la posibilidad de ser más creativos.
Gracias a las soluciones digitales planas actuales disponibles desde 70.000 euros, ya no es necesario esperar a que llegue el momento adecuado para realizar la inversión digital. Ahora es el momento.
Le animamos a seguir pensando a lo grande, y a seguir buscando las pequeñas ventajas que puede integrar en su negocio incorporando la impresión plana digital. Sin químicos, ni olores, ni líos; solo imprimir y generar beneficios. Además, gracias a la producción híbrida que combina ambas tecnologías, podrá seguir aprovechando su antigua inversión en serigrafía, ampliando su vida útil al tiempo que amplía su oferta de servicios. Es un claro ejemplo de que “El todo es mayor que las suma de las partes”.
A crear… juntos.
