La biometría ya forma parte de nuestras vidas
13 de julio de 2010
No hablamos de tecnología de ciencia ficción, ni de un capítulo de CSI, sino de una ciencia, la biometría, capaz ya en nuestros días, de analizar una porción de nuestro cuerpo que nos identifique ante un sistema de seguridad o identificación. Aunque hay muchos métodos utilizables, los más populares en biometría son la identificación dactilar, la facial, la ocular, la palmar, de voz o de ADN. Todos estos métodos son cada vez más utilizados en sectores como la hostelería o el inmobiliario, y los vemos día a día en hospitales, gimnasios, bancos y, desde hace unos meses con la llegada del nuevo DNI Digital, en la Administración pública.
Como es natural, por ser la más antigua y con una mayor base de datos, la más extendida es la tecnología de identificación dactilar (las huellas digitales de toda la vida). Ya sea por sus extremas medidas de seguridad o porque han visto en esta tecnología un gran mercado de negocio, Estados Unidos es el país donde más implantada está. No solo es obligatoria en sus aeropuertos, sino que también se está sustituyendo la clásica tarjeta de crédito por nuestro dedo pulgar, como método de pago sin dinero en metálico. Según algunos estudios, ya son 2.400 los supermercados y establecimientos comerciales estadounidenses que disponen de esta tecnología.
Es el sistema denominado Pay By Touch (que podría traducirse como 'pagar por toque' o 'pagar tocando'), que nos permite pagar un producto utilizando nuestra identificación por huellas dactilares. Según CNN, el banco polaco BPS es la primera institución bancaria que ha instalado un cajero automático con identificación biométrica. Eso permitirá a los usuarios y clientes de este banco sacar dinero de sus cuentas corrientes identificándose únicamente con su dedo pulgar. Hitachi ha suministrado a este banco la tecnología 'FingerVein' (vena de dedo), con el cual una luz infrarroja escanea el dedo para detectar un patrón único de microvenas que se encuentran bajo nuestra piel. Este sistema es mucho más seguro, según representantes de la marca japonesa, que la detección de huellas dactilares, ya que tiene una tasa de aceptación falsa de uno entre un millón. Es por tanto un sistema casi tan seguro como el de lectura de iris.
Biometría en nuestro país
Precisamente, una de las empresas que distribuye de tecnología FingerVein en nuestro país es Actum, que proporciona de una amplia gama de productos biométricos Kimaldi, como el terminal biométrico vascular FingerVein. Este es un terminal que usa el esquema de venas del dedo como patrón biométrico para identificar al usuario. El patrón vascular es una característica interna por lo que no le afecta que el dedo esté dañado o erosionado. A diferencia de otros sistemas vasculares como el de la palma de la mano, este sistema usa el patrón vascular del dedo, que es un método más rápido y fácil de utilizar, según comentan representantes de Actum y Kimaldi.
Este es un sistema que se utiliza en numerosas instituciones financieras japonesas y que es compatible con otras tecnologías de identificación (RFID, eDNI o PIN). En sus dos versiones (Offline y Online) ofrece un buen rendimiento. En el primer caso, tiene un comportamiento autónomo con conectividad. No necesita estar conectado para su operativa normal, ya que la conectividad online a software remoto es sólo necesaria para su configuración, descarga de registros y envío de eventos en tiempo real, aunque tiene una limitación a 1.000 templates en 1:1 y 1:N. La versión online, por otra parte, tiene una flexibilidad total, ya que el comportamiento del equipo es controlado a tiempo real por el software remoto del host. También tiene una limitación a 1.000 templates en 1:N, pero un número ilimitado en 1:1.
El organismo independiente de referencia International Biometric Group, que periódicamente hace comparaciones de las prestaciones de los sistemas biométricos, muestra en su Round 6 Public Report que la tecnología biométrica vascular del FingerVein tiene las tasas de FRR, FAR y FTE más bajas de todos los sistemas vasculares del mercado, incluso mejores que la biometría de iris. Además, la velocidad de reconocimiento es casi el doble que los sistemas de referencia de palma de la mano y casi el triple que los de iris.
Por otro lado, Actum también distribuye el sistema Kimaldi Kreta, que según sus fabricantes es “el terminal de control de acceso y control de presencia más robusto y adaptable del mercado”. El Kreta3 dispone de múltiples opciones de lectores (Huella dactilar, RFID, eDNI, Smart Card, Banda magnética...), de un terminal offline con monitorización y control a tiempo real (online), es adaptable a entornos de alta seguridad y es robusto y de fácil programación (con las herramientas SDK).
También tiene un funcionamiento off-line y memoria no volátil para almacenar la base de datos. En esta se guardan todos los eventos que se producen a través del terminal. Los fichajes de acceso, activación de alarma y otros eventos son enviados de forma online en tiempo real y almacenados en la memoria no volátil del terminal para ser recuperados cuando se desee. El registro de evento incluye información del momento en que se han producido y del tipo de evento producido.