Edificios de Zero Emisiones: un desafío sostenible
Bajo el título ‘Edificios de Zero Emisiones: un desafío sostenible’, el 16 de noviembre se celebró una mesa redonda organizada por Atecyr, en la que se debatió sobre cómo va a afectar al sector de la edificación, la Directiva de Eficiencia Energética de los Edificios (EPBD) una vez que se transponga y se analizaron los requisitos que han de cumplir los futuros edificios de cero emisiones.
La sesión plenaria ‘Edificios de Zero Emisiones: un desafio sostenible’ contó con la participación de Arcadio García Lastra, secretario del Comité Técnico de Atecyr; Gaspar Martín, miembro de la Comisión Técnica de Fegeca; Pedro Ruiz Romero, responsable del Departamento de Estudios y Legislación de Afec; Enrique Larrumbide Gómez-Rubiera, arquitecto especialista en Sostenibilidad Edificatoria UCC en el Instituto Eduardo Torroja de Ciencias de la Construcción; Juan Travesí, socio fundador de Aedici; Antonio Pantoja, secretario de Conaif y vocal de la comisión de Instalaciones térmicas; y Andrés Salcedo Martínez, vicepresidente de la Confederación Nacional de Instaladores; con Pedro Vicente Quiles, presidente del Comité Técnico de Atecyr como moderador.
Precisamente Quiles, a modo de introducción, se refirió a la Directiva de Eficiencia Energética en los Edificios que próximamente se va a aprobar y sobre la que el sector está expectante por ver que orientación tomará finalmente: la postura más exigente con respecto a calidad de aire y eficiencia energética o relajarán los requisitos con el fin de poder lograr los objetivos de rehabilitación energética establecidos.
A este respecto, según comentó, es necesario elaborar planes nacionales de rehabilitación que fomenten las renovaciones profundas para lograr una reducción considerable de gasto energético, apuntando el papel ejemplarizante que ha de tener el sector público.
Un problema que se puso sobre la mesa fue la armonización europea en cuestiones de eficiencia energética, y ver cómo realizar los cálculos en energía primaria en todos los países para los certificados de eficiencia energética.
Para todo ello, es imprescindible ofrecer financiación y contar con profesionales suficientemente formados.
Los participantes en la mesa aportaron su punto de vista sobre cuáles de las nuevas medidas consideran más exigentes. En este sentido coincidieron en que será difícil cumplir con los plazos previstos en la rehabilitación del parque edificatorio ya que es muy complicado alcanzar la electrificación de las instalaciones antiguas y por tanto, la hibridación y el aprovechamiento de las energías residuales puede contribuir a su consecución. Recordaron también que en este proceso de transición energética, no hay que olvidarse de las personas vulnerables, que tienen mayores dificultades.
Recomendaron llevar a cabo actuaciones de eficiencia energética en comunidades de vecinos de forma ordenada, comenzando por la envolvente, siguiendo por las instalaciones y finalmente las renovables cuando sea posible.
Y para todo ello, volvieron a reiterar la necesidad de profesionales capacitados que puede verse en peligro ante el cambio generacional y la falta de jóvenes interesados por el sector. Por ello, será imprescindible integrar a la mujer en este sector, hasta el momento, presente de forma testimonial.
Con respecto al pasaporte del edificio, los participantes en la jornada coincidieron en que debe ir acompañado de un plan de financiación asequible, con créditos ecológicos y apoyo de las administraciones públicas.
