Visita a la planta de STULZ en Esquivias

El grupo STULZ ha puesto en marcha una nueva planta de producción en Esquivias (Toledo) de 40.000m² en la que ha invertido en torno a 50 millones de euros y que da empleo actualmente a 300 personas. A finales de 2022, visitamos la planta y nada más acceder a sus instalaciones, la primera sensación que transmite es de amplitud, luminosidad y orden, lo que lleva implícito seguridad y calidad en los equipos que fabrican.

La nueva planta de producción en Esquivias (Toledo) tiene una superficie de 40.000m^2.

Desde esta planta de producción de Toledo sale una amplia gama de producto entre los que se encuentran unidades de tratamiento de aire, condensadores, drycoolers, fancoils, aerotermos y cortinas de aire. Asímismo, disponen de una propia línea de baterías, desde la cual, no solo se autoabastecen en la fabricación de los propios equipos en España, sino que también suministran componentes a otras fábricas del grupo en el mundo.

“Somos conocidos y líderes a nivel mundial en refrigeración de precisión, pero no sólo en entornos de misión crítica la compañía es un referente nacional e internacional”, nos explica Vicente Ceamanos, director general corporativo del Grupo STULZ en Iberia y Latinoamérica, quien indica que "durante varias décadas, nos hemos postulado como uno de los referentes que lideran el suministro de equipos industriales o con acabados higiénicos específicos para aplicaciones hospitalarias, laboratorios, industria farmacéutica o salas blancas donde la calidad del aire, salubridad y el confort térmico han cobrado vital relevancia”.

No obstante, aunque ofrecen soluciones HVAC integrales tanto para el mercado de centros de datos tanto como para climatización industrial, están especializados en la fabricación de Unidades de Tratamiento de Aire, “aplicando el 'Know-how y Expertise' que aporta el haber estado desarrollando en España estos equipos durante más de 50 años”, afirma Vicente Ceamanos.

Durante la visita a las instalaciones, recorrimos las diferentes líneas de montaje, todas ellas equipadas con maquinaria de última generación.

Compran la materia prima directamente (cobre, chapa, etc.) y la transforman, controlando todo el proceso y la calidad del equipo.

La cadena de montaje va desde la fabricación de los perfiles, componentes, paneles, línea de pintura, e incluso fabrican sus propias baterías a la medida de las necesidades de cada equipo, evitando así depender de los plazos de los proveedores.

Una característica destacada de esta fábrica en cuanto a diseño es la “customización”. "Aunque dispongamos de un catálogo de productos estandarizados, nos adaptamos a las necesidades del cliente, no solo en cuanto a tamaño físico, sino también en capacidades. Para eso tenemos un equipo de desarrollo propio, con más de 35 ingenieros, que diseñan el equipo ‘ad hoc’", explican. De hecho, en el momento de nuestra visita habían montado una línea exclusiva para un proyecto específico destinado a Japón.

Las claves de la fábrica de STULZ

• Integración vertical.
• Compra de materia prima y transformación directamente.
• Fabricación de las baterías.
• Test Center.
• Costumización de los equipos.

Estas nuevas instalaciones cuentan con un test center de gran capacidad, “el más espectacular y preciso a nivel europeo e incluso, me atrevería a decir, del mundo”, califica el responsable de STULZ. En él se ponen a prueba las especificaciones técnicas y condiciones ambientales más exigentes, con posibilidad de testar caudales de prueba de hasta 300.000 m³/h y una carga TI de 1MW de potencia, asistidas por un sofisticado software de parametrización y monitorización e incluso se pueden probar dos equipos simultáneamente.

Generan un prototipo siguiendo las especificaciones y requerimientos del cliente. En este centro de pruebas se pueden simular diferentes condiciones ambientales, incluyendo fallos de seguridad, incluso durante la fase de diseño y desarrollo, para determinar el rendimiento real y capacidades del equipo y sus componentes ante cualquier adversidad.

Dentro de STULZ hay personas dedicadas en exclusiva a diseñar el software a medida del cliente. Por lo que pueden presumir de un “excelente servicio al cliente que se ha acostumbrado a un trato personalizado”.

Acompañados por Juan Carlos Garcia Abarca, responsable del Test Center, pudimos pasear por una unidad de tratamiento de aire "gigante",un edificio entero que simula las condiciones climáticas exteriores de la ubicación geográfica donde se instalará el equipo a prueba, con diferentes compuertas que modulan el caudal del aire, las baterías, filtros, ...

Los FAT (Factory Acceptance Test) que llevan a cabo en este centro de pruebas garantizan el cumplimiento de todos los requisitos técnicos, de rendimiento y test de calidad de los equipos suministrados, principalmente unidades de tratamiento de aire, antes de que los equipos salgan de la planta.

Además, han desarrollado la retransmisión en vivo de los FAT para que los clientes puedan presenciar las pruebas de sus equipos, sin necesidad de viajar a la planta de producción. “Gracias a la retransmisión en streaming de las pruebas, los clientes pueden controlar su proyecto, presenciando el FAT desde cualquier parte del mundo. Esta herramienta eficiente y segura ha aportado un importante ahorro de tiempos de entrega y costes en nuestros clientes”, indica Vicente Ceamanos.

Generalmente, nos explican, trabajan con grandes empresas tecnológicas que se juegan el funcionamiento de su negocio “por lo que nuestro Test Center les da la tranquilidad de tener lo que ellos necesitan y saber que va a funcionar”.

Vicente Ceamanos, director general Corporativo del Grupo Stulz en Iberia y Latinoamérica.

Vicente Ceamanos, director general Corporativo del Grupo STULZ en Iberia y Latinoamérica

¿Por qué esa apuesta por la producción en España, cuando la tendencia actual es la deslocalización hacia otros países?

España tiene unas ventajas competitivas que no presentan otros países. Combina tecnología y talento humano de gran potencial para producir bienes de alta calidad orientados a la demanda tanto local como internacional, es líder en infraestructuras de transporte y logística, goza de buena estabilidad económica y sociopolítica en comparación con otros países también competitivos en costes y una posición geoestratégica que le permite tener unas posibilidades de apertura exterior únicas.

A todas estas ventajas competitivas de inversión, tenemos que añadir las grandes posibilidades de crecimiento de negocio que STULZ tiene en el mercado español y mercados limítrofes, tanto en sistemas de refrigeración de precisión para centros de datos y telecomunicaciones, como en sistemas de climatización industrial.

En este sentido, no debemos olvidar que España se está convirtiendo en el Hub digital del sur de Europa, en un centro estratégico a nivel europeo en el negocio de data centers, el cual va a generar una inversión directa de 7 mil millones de euros en nuevos centros de aquí a 2026 y que, para nosotros, supone actualmente el 70% de nuestra facturación.

Por otro lado, el mercado HVAC en España está creciendo en torno al 12% anual, volviendo a niveles previos a la pandemia. El mercado español es un mercado en crecimiento con un cliente cada vez más exigente en la calidad de los equipos y servicios y es ahí donde marcamos la diferencia.

¿Qué supone ese apoyo del grupo?

Esta inversión ha supuesto, no solo una inyección de crecimiento medio de producción en España del 45% anual en cada uno de los últimos tres ejercicios, sino la posibilidad de dotar a la compañía de unas instalaciones únicas, adaptadas a los más novedosos procesos de fabricación, con maquinaria más avanzada y última tecnología acorde a la Industria 4.0. Esta inversión nos va a permitir tener unas posibilidades de crecimiento y proyección excelentes en España, con el fin de hacer frente a la creciente demanda del mercado.

Estamos de enhorabuena en España y todos nos tenemos que sentir muy orgullosos de que un referente a nivel mundial como STULZ decidiera elegir nuestro país para llevar a cabo su proyecto de expansión y desarrollo más importante en los últimos años.

¿Hacia qué mercados dirigen los equipos que fabrican en Esquivias?

Nuestros equipos van dirigidos tanto al mercado nacional, en el que tenemos gran presencia y cuota, como al internacional donde estamos creciendo de forma exponencial.

En este sentido, desde la planta de producción de Esquivias, el grupo suministra a nivel mundial en mercados internacionales como Asia, Latinoamérica, África y por supuesto Europa. Grandes gigantes tecnológicos Cloud, por ejemplo, nos eligen para el suministro de nuestros equipos en otras regiones y continentes.

¿Cómo valora el mercado que se trate de producción "made in Spain"?

La producción es “made in Spain” pero no dejamos de pertenecer a un grupo alemán con procesos, filosofía y estándares de calidad alemana. Podemos estar orgullosos de ser uno de los pocos, por no decir los únicos, fabricantes de climatización que disponen de una planta de producción con estas características y tecnología en España, lo que nos aporta una ventaja competitiva única en el mercado.