"El Gobierno está a punto de dar un golpe mortal al liderazgo mundial termosolar que ostenta España", según Protermosolar
"El Gobierno está a punto de dar un golpe mortal al liderazgo mundial termosolar que ostenta España y a la contribución a la riqueza nacional que realiza el sector (2084 millones de euros de valor añadido en 2011), al alterar retroactivamente las condiciones retributivas establecidas legalmente en su día, con su nueva Ley de Medidas Fiscales para la Reforma Energética en tramitación en el Senado". Así de contundentes se muestran desde Protermosolar, la Asociación Española de la Industria Solar Termoeléctrica, a través de un comunicado.
En Protermosolar consideran que las modificaciones de las reglas de juego a mitad de partido crearían una enorme inseguridad jurídica en España para los inversores extranjeros y abocaría al Gobierno a enfrentarse a demandas ante los tribunales internacionales, "con grave daño para nuestra imagen como país e influencia en la prima de riesgo para nuestras emisiones de deuda en los mercados".
"Y todo ello justo cuando el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, insistió en la reciente cumbre iberoamericana, al igual que antes en Estados Unidos, en la necesidad de garantizar la seguridad jurídica en las inversiones españolas en el exterior, una exigencia que, en justa reciprocidad y como es obligado por los tratados internacionales firmados por España, demandan también los inversores foráneos -y nacionales- en nuestro país", señalan.
La medida retroactiva de eliminación de la prima a la parte generada con gas, unida al nuevo impuesto general del 7%, produce un impacto dramático sobre los resultados de operación de las plantas termosolares, al disminuir sus ingresos en más de un 22%. Según Protermosolar, esta reforma no se limita a diseñar un nuevo marco al que se pueda adaptar la actividad de las empresas que han previsto proyectos de construcción de plantas termosolares en España en el futuro, sino que incide gravemente sobre situaciones preexistentes y consolidadas, respecto de las que el negocio no tiene margen de actuación de ningún tipo.