Los avances técnicos en la refrigeración evaporativa la afianzan como una alternativa de ahorro energético para la construcción
La evolución técnica de los sistemas de refrigeración evaporativa ha sido una constante en los últimos años. Y éste es uno de los motivos que ha empujado a la Dirección General de Industria, Energía y Minas de la Comunidad de Madrid a apoyar, junto con Aefyt, Asociación de Empresas del Frío y sus Tecnologías, un Plan Renove de Torres de Refrigeración que afectará a aquellas torres de más de diez años censadas en dicha comunidad autónoma.
El beneficio social de este proyecto está muy relacionado con el ahorro de energía. Si se tiene en cuenta que el gasto energético en calefacción, aire acondicionado y agua caliente sanitaria ocupa un alto porcentaje en la CAM, la actuación en la mejora energética de los equipos destinados al enfriamiento tanto industrial como doméstico puede tener un alto impacto en los índices de consumo. Se calcula que el consumo energético industrial alcanza el 8,5% en la Comunidad de Madrid, mientras que el doméstico supone el 23,6% en calefacción, aire acondicionado y agua caliente sanitaria, por lo que, como se ha dicho, cualquier actuación en este sentido tendrá una fuerte repercusión en el consumo global.
El último censo de torres de refrigeración en la CAM arroja la cifra de 3.451, de las cuales solo el 36% tienen menos de 10 años. Las demás, esperan poder beneficiarse de una renovación que se traduzca en seguridad y eficiencia energética.
Podrán acogerse a este primer Plan Renove aquellas empresas o comunidades de propietarios que tengan en activo torres de refrigeración de más de diez años y que quieran sustituirlas por otros equipos de refrigeración evaporativa que supongan, como mínimo, una mejora en el rendimiento energético del 10 por ciento. El incentivo económico se ha fijado en 0,5 euros sobre kilovatio de potencia disipada en condiciones estándares de 24°C de humedad relativa del aire (bulbo húmedo) y +35°C/+30°C de temperaturas de entrada/salida de agua. La iniciativa supone una oportunidad única para aquellos proyectos de rehabilitación de edificios en los que se tenga en cuenta la eficiencia energética.
La aplicación del Plan Renove de Torres de Refrigeración comenzó con la firma del convenio y se prolongará hasta diciembre de 2015. Los firmantes calculan que podría afectar al 10 por ciento de las torres de refrigeración que funcionan en la Comunidad de Madrid.
Una alternativa de climatización segura y eficiente
Paradójicamente, en los últimos años, sin embargo, se ha producido una clara expansión de los dispositivos de condensación por aire, favorecida, entre otros factores, por una legislación restrictiva al empleo de los de base evaporativa fundamentándose en temores de carácter bio-sanitario causados por la bacteria Legionella. Ante esto, cabe decir que los equipos de refrigeración evaporativa son totalmente seguros con un correcto mantenimiento, como indica la Ley y como recomiendan todos los fabricantes. En contrapartida, los equipos de condensación por aire ofrecen condiciones muy inferiores en lo que a ahorro energético se refiere. En las instalaciones de climatización y refrigeración, la eficiencia energética y el consumo de energía eléctrica están directamente relacionados con la temperatura de condensación del refrigerante utilizado, menor en la condensación evaporativa que en la condensación por aire.
Central de biomasa.
Pero, además, los últimos avances técnicos han venido a ofrecer mayores garantías de seguridad y de eficiencia. Desgranamos a continuación las claves técnicas, que se centran fundamentalmente en avances en cuanto a materiales, accesibilidad, regulación y control, y que recogen las modernas torres de refrigeración.
Materiales y diseño para garantizar la seguridad
En lo que respecta a los materiales, su evolución se ha centrado en los rellenos de alta eficacia, que se han transformado gracias a la utilización de materiales resistentes, fundamentalmente polipropileno y poliéster, que ofrecen una gran resistencia y permiten limpiezas severas; otro componente de la torre en que los materiales han mejorado son los separadores de gotas de alta eficiencia, que han experimentado una evolución similar en cuanto a composición y eficacia a la hora de reducir la salida por arrastre de gotas de agua al exterior de la torre formando aerosoles. Éste último es un aspecto crítico a la hora de transmitir a la atmósfera posibles colonias de bacterias.
La accesibilidad de los equipos de refrigeración evaporativa también es un aspecto fundamental que ha evolucionado drásticamente. Una correcta accesibilidad es una de las mejores garantías de que la limpieza de la torre se podrá realizar correctamente. En este sentido, las torres actuales presentan una accesibilidad extrema a través de puertas amplias que permiten la entrada a las mismas de los equipos técnicos sin ningún problema.
Igualmente, los sistemas para facilitar el drenaje, la limpieza y la toma de muestras se traducen en bandejas inclinadas, plataformas y escaleras que, además, es importante señalar que cumplen las normas más exigentes en materia de seguridad laboral.
En este capítulo, merecen mención aparte las ventanas, cuyo diseño evita el paso de luz o agua que lleve suciedad. Impedir el paso de la luz es especialmente importante para evitar que los rayos ultravioletas provoquen las condiciones necesarias para el desarrollo microbiológico en el interior de la torre. Este es, precisamente, uno de los grandes avances experimentados en los últimos tiempos: el sellado de las ventanas es una garantía de seguridad y buen funcionamiento del equipo.
Avances técnicos que incrementan la eficiencia energética
Las mejoras hasta aquí descritas contribuyen, fundamentalmente, a evitar la proliferación de bacterias, especialmente la Legionella Pneumophila. Otras están pensadas para optimizar el rendimiento energético de las torres de enfriamiento, que se reconocen entre los equipos más eficientes en climatización.
Entre estas últimas, los motores de alta eficacia, que responden a las normas IE 2 e IE 3, ofrecen un rendimiento muy elevado. A ello contribuyen dramáticamente los convertidores de frecuencia que permiten la regulación y el control del funcionamiento del equipo de manera que la necesidad de energía se ajusta exactamente a las necesidades de consumo y mantenimiento. El resultado es un funcionamiento de la torre ‘a la carta’ con la consiguiente optimización energética.
Tanto en lo referente a la eficiencia energética como a la seguridad socio-sanitaria, el correcto mantenimiento de una torre de refrigeración es un factor irrenunciable. Los fabricantes de los equipos de última generación también tienen en cuenta la necesidad de facilitar el trabajo de los técnicos de mantenimiento con avances como sistemas de purga automatizados que evitan altas concentraciones de sal. Así mismo, las torres pueden incorporar sistemas de control bacteriológico y de tratamiento de agua en continuo que las mantienen en óptimas condiciones.