Los asociados de la RCxB exponen qué ha hecho cada ciudad ante la Covid-19
La Red de Ciudades por la Bicicleta organizó una jornada técnica en la que varios de sus asociados expusieron las prácticas realizadas en este entorno de pandemia (Covid-19) para poder reflexionar sobre cómo continuar interviniendo en las ciudades para promover el uso de la bici.
Fue un evento celebrado de manera online al que se inscribieron más de 200 personas y que contó con la participación de entidades asociadas de todo tamaño y ubicación geográfica: Casar de Cáceres, Benidorm, Coslada, Santander, San Sebastián, Fuenlabrada, Pamplona, Terrassa, Valladolid, Diputación de Gipuzkoa, València, Barcelona y Área Metropolitana de Barcelona.
Antoni Poveda, presidente de la asociación que ya cuenta con más de 130 miembros, presentó la jornada “Reflexiones sobre cómo continuar interviniendo en las ciudades para promover el uso de la bici” en la que se contó con la presencia y participación del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA), poniendo al día a los asistentes de la situación de la Estrategia Estatal de la Bicicleta, de la que la Red de Ciudades por la Bicicleta es un actor principal, habiendo trabajado mano a mano junto a la Dirección General de Tráfico y diferentes entidades estatales en los últimos años.
La movilidad en bicicleta ya era uno de los principales ejes de transformación urbana de la última década, en un contexto global de emergencia climática y de crisis de calidad del aire en las ciudades. Pero el contexto de excepcionalidad vinculado a la Covid-19 ha supuesto un revulsivo para la bicicleta como alternativa de movilidad. Con el referente de algunas actuaciones realizadas en diversas metrópolis europeas y del resto del mundo, se han generado en nuestras ciudades múltiples intervenciones en diferentes ámbitos con el objetivo de mejorar las condiciones para la movilidad en bicicleta, que se ha mostrado como una de las alternativas más seguras para evitar la propagación del virus.
Han sido actuaciones planteadas y ejecutadas en muchos casos contra el factor tiempo, no exentas de ciertas controversias, y sin un marco de referencia compartido o consolidado, que se ha ido construyendo sobre la marcha a partir de las propuestas que se han llevado a cabo en las diferentes ciudades, y que tienen como denominador común la voluntad de mejorar las condiciones de habitabilidad con un horizonte que va allá de la actual crisis sanitaria.
La propuesta fue una mirada reflexiva a algunas de las actuaciones hechas estos últimos meses, para contribuir a la generación de unos criterios generales que permitan orientar las actuaciones en favor de la bicicleta a corto y medio plazo, en un contexto todavía incierto de crisis epidemiológica, y a las puertas de una década clave para el futuro de la civilización humana en el planeta Tierra.