Descubrimos la historia de Blair Braverman y su paso del mushing al bikejoring
¿Que no hay nieve? No hay problema. ¿Qué puede hacer una experimentada musher durante la pretemporada cuando tiene que seguir manteniendo en forma a sus perros? La escritora y aventurera profesional Blair Braverman compagina su pasión de entrenar perros de trineo con una de sus grandes aficiones que le permite disfrutar al aire libre: el mountain bike. Hoy te explicamos su historia.
El mushing es un deporte en el que lo importante es el equipo, formado por perros que aún están aprendiendo y perros ya jubilados, pero todos tienen una cosa en común: sus ganas insaciables de correr. Sin embargo, cuando cambia la estación y caen las temperaturas, mantener a los perros activos y en forma es un reto. Cuando no hay nieve, los guías suelen utilizar motocicletas o una especie de carritos con ruedas para entrenar, pero siempre buscan formas de mantener a los perros activos durante la pretemporada. Así es como llega el bikejoring, donde el guía utiliza una bicicleta en lugar de un trineo. Blair eligió la Fuel EX de Trek porqué vio que era ideal para esta nueva aventura.
Con las carreras de trineos programadas para finales de 2020 y 2021 en el aire, y siendo la salud una de las mayores preocupaciones de Blair, ella, Quince y los perros entrenarán en el Medio Oeste en lugar de en Alaska por primera vez en muchos años. Su deseo es disfrutar de las aventuras en los senderos que conectan los estados de Michigan, Minnesota y, por supuesto, su adorado Wisconsin.
Mientras los perros puedan correr, estarán contentos. «Lo que más les gusta es correr, incluso más que comer o que les achuchen», bromea Blair. «Y compartir esa ilusión es pura magia». Esta aventura en bicicleta es solo una parte de la vida de Blair. En su libro Welcome to the Goddamn Ice Cube descubrirás muchas más cosas sobre ella.
Acabemos con los consejos de Blair Braverman para los aspirantes a aventureros:
1. Di siempre que sí y ve.
2. Aprovecha la ocasión para aprender de las experiencias de otras personas.
3. Intenta introducir novedades en tus actividades al aire libre, incluso si al final decides que no son lo tuyo.
4. Aprende a diferenciar el miedo, las incomodidades y el peligro.
5. Presta mucha atención a tu propio cuerpo y a tus propios límites: tu cuerpo es diferente al de otras personas y eres la única persona que realmente sabe cómo responde y qué necesita.
6. Pasa una noche al aire libre y en completa soledad (y, si puede ser, sin tienda de campaña). Pasar una noche solo al aire libre puede parecer aterrador en un principio, pero una vez que te sientas cómodo, podrás disfrutar de aventuras completamente nuevas.