Trágico inicio del año con 8 muertes por incendio en vivienda
Ocho personas han muerto y otras catorce han resultado heridas en diversos incendios de viviendas que se han producido desde el inicio del año. El comienzo de 2020 es uno de los más trágicos que se recuerdan (dos jóvenes muertos y un bebé en extrema gravedad, en Huelva; un fallecido en Ginés, Sevilla; dos muertes en Hellín, Albacete; un fallecido en Gorliz, Vizcaya; 2 muertes en Archena, Murcia, de madrugada, causas probables, un brasero. Un caso, similar, el 29 de diciembre en Cártama (Málaga) 2 ancianos, de madrugada, causa probable, un brasero).
Aunque el último Informe 2018 víctimas por incendio que realizan aseguradoras y bomberos* refleja un descenso importante en la media diaria de fuegos que se produjeron en el hogar: 42 frente a 63 de 2017, así como una reducción del número de intervenciones de los bomberos, 15.387 frente a 23.000 en 2017, la tendencia en los últimos 10 años es de aumento progresivo de los incidentes por incendio con víctimas. Según datos de la patronal del seguro, Unespa, durante 2018 se produjeron 93.467 Incendios 1 cada 5 minutos y 37 segundos.
El informe de víctimas por incendio destaca que uno de los colectivos más vulnerables es el de los ancianos que viven solos; la peor época del año, el invierno; y el lugar donde se registran más siniestros, el salón. Entre las principales causas de los incendios destacan las causas eléctricas (sobrecarga, malas instalaciones), con un 15% de incidencias; y en segundo lugar, un 12% se debe a incidencias debidas a los productores de calor, como radiadores, braseros, etc.
Los datos provisionales de 2019 nos hacen temer que sea uno de los perores años de la década, ya que en el primer trimestre de 2019 se contabilizaron con 75 víctimas mortales. Y en el último trimestre del año han sido 55 las víctimas, según los primeros análisis.
Una cifra provisional a falta del recuento y análisis final del año, pero que constata que el riesgo de incendio es una de las principales causas de muerte en la vivienda. Algo evitable según todos los estudios realizados en otros países de nuestro entorno (Francia y Reino Unido han conseguido reducir un 70% las muertes por incendio en vivienda en los últimos 50 años), que han tomado el problema de frente y han reducido el número de muertes notablemente, solo con unos cambios en la legislación y una gran campaña de concienciación.
En esta línea que ya ha dado buenos resultados, desde Tecnifuego recomiendan dos medidas esenciales: instalar detectores de humo en las viviendas y realizar una campaña de concienciación a nivel nacional.
En primer lugar, la inclusión en el Código Técnico de la Edificación de la instalación de detectores de humo en las viviendas. Cuanto antes se detecte un incendio, más tiempo queda para evacuar, para luchar contra el mismo y menos daños se producirán.
En segundo lugar, instan a la Administración a realizar una campaña de concienciación sobre el riesgo de incendio y las medidas de protección.
Por ejemplo, otros sistemas comunes y básicos para protegerse contra un incendio en el hogar, además del detector, son el extintor y la manta ignífuga.
No podemos quedarnos impasibles ante las muertes por incendio, aseguran desde Tecnifuego y añaden que es necesario tomar medidas desde todos los ámbitos –públicos y privados- para que cambien esta tendencia y se refuerce la seguridad de las personas. La Administración tiene que contribuir a ello con una campaña intensa de concienciación sobre la necesidad y beneficios de instalar aparatos de protección contra incendios (PCI), así como, en el ámbito regulatorio, velar para que se cumplan las nuevas obligaciones que ha incluido el Reglamento de instalaciones de protección contra incendios (RIPCI) en los edificios de vivienda.
*Fundación Mapfre y APTB, Asociación Profesional Técnicos Bomberos.