Peter Esselens, director general de Soudal Ibérica: “Una buena ventana, mal instalada, es una mala ventana”

“Aunque el fabricante haga una ventana fabulosa, aun con los mejores vidrios y perfiles, si su instalación no está a la altura de esa calidad, el cerramiento no va a poder ofrecer sus mejores prestaciones”, afirma tajante Peter Esselens, director general de Soudal Ibérica, empresa integrada en la Asociación Española de Fabricantes de Ventanas de Madera y Mixtas Madera-Aluminio (Asoma). Con una ventana mal instalada, el problema es para el consumidor, y es el fabricante de la ventana quien adquiere mala fama.

La pérdida de energía en un edificio se produce principalmente a través de su envolvente. Ahí la ventana es protagonista. Porque a través de ella se producen puentes térmicos y también filtraciones. Tanto en el norte como en el sur. Y eso tiene muchas consecuencias.

La primera de ellas se detecta en las facturas de la luz y el gas. En segundo lugar, perjudica a la calificación energética de la vivienda, factor que cada vez tendrá más peso en el valor de la misma. Aunque no parezca importar a mucha gente, también se genera un daño importante e innecesario al medio ambiente. Además, el usuario de la vivienda pierde confort; por culpa de filtraciones de aire, corrientes, condensación, hongos, etc. También padecerá contaminación acústica, si existe un simple agujero en el sellado.

En las casas de consumo energético casi nulo y Passivhaus necesitamos sistemas de ventilación mecánica. Con las ventanas mal selladas, estos sistemas tampoco funcionan.

La energía en España es muy cara, si tenemos en cuenta los ingresos medios de sus ciudadanos. Los cambios diarios de la temperatura en muchas ciudades de España son muy pronunciados. “Tenemos muchas más razones para aislar bien nuestras casas, empezando por un correcto sellado de la ventana”, observa Peter Esselens.

Legalmente, existen en la Unión Europea los objetivos 20-20-20. Con respecto a las cifras de 1990, los compromisos de la Unión Europea para lograrlo son:

• Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en un 20% (30% si se alcanza un acuerdo internacional)
• Ahorrar el 20% del consumo de energía mediante una mayor eficiencia energética, además, en cada país el 10% de las necesidades del transporte deberán cubrirse mediante biocombustibles
• Promover las energías renovables hasta el 20%

El objetivo del 20/20/20 para 2020 es llevar a Europa hacia el camino del futuro sostenible, con una economía que genere pocas emisiones de carbono y consuma menos energía. Para empezar, los edificios públicos habrán de registrar un consumo energético casi nulo el año que viene, en 2019. De una u otra forma, antes o después, esto llegará, y habrá que cumplirlo. “Es mejor que nos vayamos adaptando, cuanto antes”.

Si hemos evolucionado en la fabricación de la ventana, ¿por qué seguimos instalándola como hace veinte años? Según el director general de Soudal, miembro fundador de Asoma, posiblemente el sector del cerramiento no está llevando a cabo un marketing correcto: “Todo el mundo está poniendo bombillas LED en su casa, y nadie compra un frigorífico que no tenga la calificación energética A; todo ello porque vamos a ahorrar energía. Pero con las fachadas y sus ventanas no hemos llegado aún a este punto de estar tan convencidos y ser tan exigentes”.

El fin es incorporar a la envolvente unos cerramientos herméticos y estancos. Soudal ofrece numerosas soluciones a tal efecto, porque cada obra es distinta. “Es bueno poder adaptarnos a las diferentes situaciones que nos encontramos, y elegir el sistema apropiado a cada una de ellas”.

Soudal es unos de los mayores fabricantes en el mundo de adhesivos, selladores y espumas de poliuretano. La firma belga, una empresa familiar que en 2017 celebró su 50 aniversario, ofrece soluciones tanto al profesional, vía suministro industrial y ferretería, como al particular, a través del canal bricolaje. “Invertimos mucho dinero en I+D. Con el objetivo de mejorar continuamente nuestros productos y las condiciones de trabajo de nuestros clientes”, apunta Peter Esselens.