La división de PVC de la multinacional gallega incrementó sus ventas un 40,7% durante el último ejercicio

Cortizo PVC ha cerrado el 2018 con una facturación de 21,1 millones de euros y un crecimiento del 40,7% respecto al ejercicio anterior, lo que se traduce en más de 1.340.000 barras producidas. “El 2018 ha sido el año de la consolidación”, asegura el gerente de Cortizo PVC, Estanislao Suárez.

“En Veteco todos los actores del sector pudieron constatar en primera persona la calidad y servicio que ofrecemos, con una gama de productos que nos sitúa a la vanguardia del sector en Europa: sistemas con certificación Passivhaus, soluciones de hoja oculta, nuevos acabados…por lo tanto, es el momento de iniciar la internacionalización de nuestros productos. No hay ninguna razón por la que no estar en todos los mercados europeos, empezando por el alemán”, concluye Estanislao Suárez.

Cortizo inició su actividad como fabricante de perfiles de PVC para ventanas en el 2014, convirtiéndose entonces en la única empresa española que diseñaba y producía sus propios sistemas de este material. Desde entonces no ha dejado de crecer, situándose como un referente del mercado en la Península Ibérica. En la actualidad emplea a más de 70 trabajadores en su centro productivo de Padrón, donde ha invertido, durante el último año, más de 10 millones de euros destinados a la ampliación de sus instalaciones y al incremento de la capacidad productiva de la fábrica. Entre las actuaciones realizadas destaca la incorporación de nuevas extrusoras, la instalación de líneas de foliado en continuo con la extrusión, nuevos silos con capacidad para 600 toneladas de materia prima para la fabricación de perfiles, así como nuevas mezcladoras que permiten incrementar la capacidad de producción hasta los 10.000 kilos por hora. La compañía gallega continuará con nuevas inversiones durante este ejercicio para abordar la creciente demanda de un mercado en el que se ha colocado a la cabeza en tan solo cinco años.