El sector ecológico exhibe músculo en BioCultura BCN
BioCultura BCN, que se ha celebrado del 4 al 7 de mayo en el Palau Sant Jordi de Barcelona, ha mostrado que, pese a la crisis coyuntural, el sector ecológico sigue creciendo y responde de forma muy dinámica y creativa a las necesidades de un mundo cambiante. Con una afluencia de público de cerca de 50.000 personas, la euforia entre los expositores ha sido palpable, especialmente gracias al éxito del certamen. La novedad de la feria de este año, OrganicFIT, ha irrumpido con fuerza, con nuevas ideas y nuevos públicos.
Ángeles Parra, directora de BioCultura y presidenta de la Asociación Vida Sana, la entidad organizadora de la feria, señala: “Por un lado, estoy muy contenta por el éxito de la feria pero, por otra parte, me apena… Creo que la gran afluencia de público que se ha producido tiene que ver con que las crisis que ya estamos viviendo, como el calentamiento global (y su sequía asociada, por ejemplo) o la pérdida de la diversidad. Muchas de las enfermedades de nuestra sociedad actual ya han calado en la mente de la ciudadanía. Quiero decir que cada vez más personas identifican cuáles son las causas que están originando los problemas a los que la humanidad se enfrenta y se han decidido a actuar sin esperar a que las soluciones lleguen de los estamentos administrativos ni mucho menos de las industrias, que, de alguna manera, han estado en el origen de tantos problemas. Así las cosas, toca actuar y urgentemente”.
Para Juan Carlos Moreno, director comercial de la feria, “BioCultura está apostando para que el sector ecológico no pierda su idiosincrasia, la que le vio nacer. Ahora mismo, muchas empresas que germinaron y crecieron en el mundo ‘bio’ de hace tres o cuatro décadas han crecido mucho, pero muchas otras empiezan con mucha energía y convencidas de su papel en el cambio del motor económico más ético y necesario. Por otra parte, la gran distribución y grandes empresas multinacionales han irrumpido con mucha fuerza. Las marcas blancas ‘bio’ están cada vez más presentes en el canal de ventas convencional. Quizá en lugar de verlo como un problema por el miedo a que apliquen las mismas reglas que ha llevado a cabo en el sector agroalimentario convencional, con las tristes y pésimas consecuencias que todos conocemos, deberíamos verlo como una oportunidad para que los productores ‘bio’ exijan un precio justo por los alimentos sanos que producen”.
Y añade: “BioCultura sigue en sus trece y apuesta por el espíritu primigenio del mundo orgánico y por los productores pequeños y más activistas. Estamos convencidos de que hay un público que respalda con su apoyo esta apuesta. Porque, si no, no se podría entender muy bien el éxito de la feria, 40 años después de su estreno. No somos un producto de masas, pero detrás nuestro hay una cada vez más una amplia minoría que también quiere voz y voto. Y toda esa gente no tiene ninguna duda de cuál es la sociedad más ecológica, más justa y más sostenible… Justo la que el planeta necesita”.
Los pasillos llenos, las salas abarrotadas y una cierta euforia de los expositores avalan las palabras del director comercial de la feria.
OrganicFIT, la gran novedad
OrganicFIT ha sido una de las novedades más esperadas de BioCultura este 2023. Al frente, Susanna Diracano y Estrella Burruezo, que han sabido dinamizar un espacio nuevo dentro de la feria dedicado al movimiento orgánico.
“Buscábamos plantear un espacio nuevo dentro de BioCultura que, sin romper con la idiosincrasia de la feria, fuera capaz de aportar nuevas ideas en busca de nuevos públicos y nuevos formatos”, señalan. “A pesar de que nos estábamos estrenando, hay que decir que nos ha sorprendido el éxito de convocatoria obtenido. La práctica totalidad de las sesiones, tanto prácticas como teóricas, han marcado una dinámica impresionante. Ha venido un público heterogéneo, pero sin lugar a dudas buscando consejo, apoyo y con unas ganas de aprender que nos han, incluso, emocionado. Queríamos ser una brisa fresca en la feria y nos alegra haberlo conseguido. Ahora, con nuestro propio aprendizaje ante un evento tan maravilloso, afrontamos el estreno en BioCultura Madrid 2023, para noviembre, con mucha ilusión y más energía todavía”, amplían.
Showcookings ecogastronómicos y showrooms eco
De todas las salas de BioCultura BCN, la que se lleva la palma del éxito es el showcooking ecogastronómico. Desde la dirección de BioCultura BCN señalan que “es un espacio que no falla nunca. Porque todos los talleres, las presentaciones, las degustaciones, las catas… Todo está lleno de creatividad y pasión de chefs que han entendido que la cocina es un motor de cambio que ayuda no solo a estar más saludable, sino a modificar nuestros hábitos de consumo hacia un consumo más responsable”.
Otra sala con mucho seguimiento ha sido el showroom, dedicado a la ecoestética. Su responsable, Yolanda Muñoz del Águila, ha confesado que “actualmente la aroma-terapia se encuentra en auge, cada vez hay más formación y cada vez tenemos más empresas de referencia en España que tienen aceites esenciales de alta calidad. También es cierto que, por otro lado, como en todo lo que se pone de ‘moda’, hay mucha información ‘desinformada’, y en numerosas ocasiones hay quien, consciente o inconscientemente, está jugando con la salud de las personas”.
En la edición de este año del showroom de la Plataforma EcoEstÉtica, la aroma-terapia científica ha tenido una presencia más que notable. Pero también han gustado mucho otras iniciativas relacionadas, por ejemplo, con los champús sólidos, los tintes para el cabello orgánicos y/o las certificaciones del sector de la eco-cosmética.
Actividades profesionales
Las actividades profesionales han tenido un gran seguimiento y participación de todos aquellos que quieren seguir estando al día, buscar nuevos canales de venta, no perder el tren de las oportunidades del mercado y, sobre todo, compartir experiencias. El mercado ‘bio’ se encuentra en un desarrollo y crecimiento constante y hay que seguir tomándole el pulso. Tanto los ponentes como las empresas que han participado como público han felicitado a la organización por las diferentes iniciativas formativas y de networking que se han desarrollado.
“Hay que seguir creciendo, sin perder los valores que nos han traído hasta aquí”. Así se podría resumir el sentir general de este sector de la comercialización tan apasionado como es el de la cultura ‘bio’. También se han desarrollado misiones inversas, en esta ocasión con empresas griegas, que ven a nuestro país como una oportunidad para crear alianzas de fortalecimiento económico. Las visitas de tiendas del sector especialista ha sido más que notable y de gran satisfacción para los expositores que no han parado de trabajar en estos 4 días de actividad.
Espacio para la diversión
La sala El Manicomio se ha encargado de la parte más cultural de la feria, con debates, ponencias, conciertos, sesiones de relajación, etc. Pablo Bolaño, su responsable, señala que “ha sido un placer poder contar con una nómina extraordinaria de ponentes y músicos. En el mundo moderno, parece que toda la cultura y toda la música tienen que ir por unas coordenadas determinadas. Pero hay muchos creadores y hay muchos públicos. Y hay vida más allá de los medios de comunicación de masas. Este año, como en el anterior, El Manicomio ha registrado llenos con determinadas actuaciones y sesiones. Incluso las sesiones que no han contado con llenos son indispensables para un mundo cultural agonizante que piensa tanto en el éxito que se olvida que la cultura, para serlo, tiene que ser rebelde, indómita, irredenta. En El Manicomio, precisamente, lo que triunfa es lo más opuesto a la ideología del pensamiento único que hoy protagoniza la sociedad del consumo, la más materialista de la historia”.
Para el público familiar, creando conciencia para las generaciones que están creciendo, la feria ha contado con un espacio reservado al festival infantil MamaTerra. Talleres de cocina, de pan con levadura madre, reciclaje, juegos creativos para crear conciencia… La educación en valores es indispensable y ese es el papel que, mediante el juego, ha querido crear este espacio de BioCultura. En esta ocasión, acompañados por los personajes de ‘La Granja Feliz’: Summer y Todd.