Ahorra combustible y es respetuoso con el medio ambiente, al combinar una estructura ligera con un compuesto avanzado de la banda de rodadura, necesita menos energía para rodar. El resultado es un menor coste de combustible y menos emisiones de CO2 en cada viaje.
Permite recorrer más kilómetros sin cambiar los neumáticos. El compuesto de sílice de la banda de rodadura mantiene el neumático en funcionamiento durante más tiempo, lo que le permite ahorrar dinero.
Con una superficie de la banda de rodadura única y una disposición de láminas que evacúa el agua, ofrece un mejor rendimiento con lluvia y una menor distancia de frenado que otros neumáticos de su clase.
Conducción silenciosa y cómoda, gracias a un diseño de bloques que reduce el ruido.
Los neumáticos de verano están optimizados para condiciones no extremas. Se pueden utilizar todo el año en múltiples regiones, pero su rendimiento se degrada por debajo de los 7 °C.