Entrevista a Guillermo De Robert, gerente de Intergrúas 2000
2 de diciembre de 2011
¿En qué niveles se mueve hoy la sobreoferta de grúas móviles en España, respecto a la demanda existente? ¿Se ha recortado este desequilibrio en los últimos meses?
El trabajo en España sigue bajando y los alquiladores siguen reduciendo su parque para adaptarse a la situación económica. Pero creo que el ritmo de venta sigue estando por debajo de lo que tendría y que la sobreoferta impide empezar a revalorizar los precios de alquiler.
¿Es homogénea esa sobreoferta en todos los rangos de capacidades de carga, desde las grúas más pequeñas hasta las más grandes?
Dentro del mercado de alquiler, se puede decir que, en el rango de gran tonelaje, ya se ha recortado bastante la sobreoferta. El parque está más o menos equilibrado con la demanda, y la prueba está en que no se vende mucha grúa de gran tonelaje. Una de las consecuencias es el nivel de precio de alquiler, que a veces se ha podido reequilibrar a favor del alquilador aunque no lo suficiente. Pero ya no está al nivel catastrófico de la tarifa de alquiler de las grúas de pequeño tonelaje, de 25 a 80 toneladas. En este rango, sí que sigue habiendo sobreoferta respecto al trabajo que existe.
¿Cree que el parque de grúas móviles en España creció de forma irracional durante los tiempos de bonanza?
No hay que olvidar que España es un país relativamente pequeño. Con 47 millones de habitantes, se encuentra en la posición 29 de los países más poblados del mundo. A pesar de ello, España, en los 4 ó 5 años anteriores a la crisis, compró entre 300 y 350 grúas móviles nuevas al año, mientras Francia, con una población más importante y una red industrial mucho más desarrollada, no llegaba a 100 unidades nuevas compradas al año.
Y en la compra de usado, mucho más difícil de contabilizar, ocurrió lo mismo. Hemos pasado una década entera (desde 1998 hasta 2007) limpiando los parques de grúas móviles usadas de Europa Occidental.
¿A qué factores achaca Ud. este crecimiento tan desproporcionado?
En buena parte porque iba asociado al crecimiento totalmente desordenado y desregulado de los sectores inmobiliarios y financieros de la economía española. Las entidades financieras no cumplieron con su función reguladora, dando fácil acceso al mercado de alquiler de grúas a muchas empresas o empresarios que en una situación normal no lo hubieran tenido.
¿Cómo puede ayudar a aliviar los parques de alquiler una empresa especializada en la compra-venta de grúas como Intergrúas 2000?
Esto es muy sencillo, ayudando a regular el mercado ajustando el parque a la demanda existente.
¿Cuáles destacaría Ud. como elementos diferenciales del servicio que ofrecen al alquilador español en necesidad de vender una o varias grúas?
Llevamos 5 años con la certificación ISO:9001, lo cual da a entender que nuestra empresa está enfocada principalmente a la satisfacción del cliente. Esto se traduce, en nuestro oficio, con una oferta de servicio a medida. Actualmente, existen dos situaciones diferenciadas como razones de venta: el alquilador que vende activos libres de carga para hacer caja, o el que vende activos financiados para quitarse letras y a su vez aligerar las cuentas mensuales. Nuestro servicio se adapta a dichas realidades.
Al vendedor que no tiene necesidad urgente de vender, le valoramos al mejor precio sus activos y le ofrecemos una gestión de venta en la que se incluye la labor administrativa (transmisión o baja del vehículo), financiera (crédito documentario, relación con el banco, registro de BM…), técnica (intervención de mecánico…) y logística (organización de transporte y flete). Ponemos a su disposición nuestros medios publicitarios, publicando sus grúas a nivel internacional, en webs y revistas.
Y al vendedor que, por el contrario, tiene una necesidad urgente de disponer de liquidez, ¿qué le ofrecen?
Una compra rápida e íntegra de su material. De esta manera, la maquinaria pasa a formar parte de nuestro stock, tras lo cual se lleva a cabo la gestión de venta.
Nuestro equipo se compone de un responsable comercial y de tres trabajadores involucrados en la gestión administrativa, logística, financiera y operacional de las ventas. Ponemos a disposición de los clientes, tanto vendedores como compradores, estos medios con el fin de llevar a cabo una gestión de venta 100% satisfactoria, lo que nos diferencia de nuestra competencia.
¿Qué garantías tiene el posible comprador de una grúa usada de que ese equipo esté en condiciones óptimas de funcionamiento?
Antes de ofrecer la grúa, nos encargamos concienzudamente de averiguar la situación financiera, económica y técnica en la que se encuentra. Para ello nos desplazamos para probar el funcionamiento de la grúa, dejar claramente definidas las condiciones de venta con el propietario e informarnos tanto de la situación jurídica de la empresa como de sus activos. De esta forma el cliente comprador estará bien informado sobre el producto y sus condiciones de venta antes de programar un desplazamiento, en ocasiones bastante largo.
Pero no olvidemos que una grúa usada no es una grúa nueva. No hay garantía contractual. La primera responsabilidad del posible comprador es la elección de un vendedor profesional y competente. Sin ser una garantía, esto le ayudará a realizar una compra más segura.
También existe la posibilidad de que contratemos un servicio técnico independiente para la revisión exhaustiva de la grúa a adquirir.
La globalización es un proceso imparable, también a nivel comercial con las grúas móviles. ¿Con qué red internacional cuentan ya en Intergrúas 2000?
Llevamos tiempo desarrollando una red internacional de compra-ventas asociadas que nos permiten tener un amplio conocimiento de ciertos mercados. Esta red está presente en los mercados de Europa del Este, Medio Oriente, Asia y Sudamérica, lo que nos ha permitido vender a lo largo de este año cerca de 60 grúas.
España ha pasado de ser un país importador de un gran volumen de grúas móviles (referencia prioritaria para muchos fabricantes) a buscar dar salida fuera de nuestras fronteras a muchas de ellas. ¿Cuáles son los mercados foráneos donde actualmente existe mayor demanda de este tipo de máquinas?
La demanda está fluctuando mucho y algunos de los países que compran grúas en estos momentos son Chile, Qatar, Corea del Sur, Australia…
Intergrúas 2000 fue de las primeras empresas en apostar por el mercado norteafricano. ¿Se ha visto perjudicado su crecimiento en esta zona por la llamada “Primavera Árabe”?
El mercado marroquí se ha visto paralizado unos meses a la expectativa del resultado de las elecciones generales que tuvieron lugar a finales de noviembre de este año. Pero la ventaja de Marruecos es que es un país con indudable estabilidad política y con una monarquía dirigida por un rey joven, consciente de las necesidades vitales de su país, por lo cual la Primavera Árabe no dio lugar a cambios drásticos en el país. Las buenas perspectivas de trabajo existentes desde hace varios años siguen en vigor. En Marruecos hay trabajo para los diez próximos años.
Se han importado muchas grúas móviles, el parque ha crecido mucho y empieza a haber sobreoferta en ciertos sectores.
¿En qué situación se encuentra ahora la iniciativa empresarial que arrancaron en Marruecos?
Dentro de esta situación que comentaba, la empresa Intergrues Levage, creada en 2009, se encuentra en periodo de estabilización. En 2011, no hemos aumentado nuestro parque aunque hemos mejorado la formación de nuestros operadores de grúas y mecánicos.
A nivel comercial, seguimos trabajando en grandes proyectos como Tanger-Med, la fábrica de Renault o la refinería de Mohamedia cerca de Casablanca. Nuestro ratio de ocupación del parque es de un 92%.
¿Cómo cree que evolucionará el mercado de la grúa móvil en España durante los próximos meses?
Se nos presenta un año 2012 más complicado que el 2011. La crisis de la deuda europea obliga a nuestro nuevo gobierno a recortar más en los presupuestos, en consecuencia no habrá nuevos proyectos en 2012.
Este año ha sido desastroso para las empresas, muchas de las cuales han tenido que emplear las reservas existentes para poder seguir funcionando o simplemente han desaparecido, pero lo peor de todo sigue estando en la falta de perspectivas. A tal punto que muchas empresas se preguntan si merece la pena seguir luchando, en vez de sencillamente vender los activos y cerrar el negocio.
¿Cómo se puede invertir esta situación tan negativa?
La profesión entera tiene que reflexionar y trabajar en crear las condiciones adecuadas para revalorizar los precios de alquiler. Por cierto, para poder eliminar la sobreoferta de grúas móviles en España, cada empresa tiene que adaptar su parque a las necesidades de su área de negocio. Pero pensar que eliminar la sobreoferta de grúas es suficiente para revalorizar los precios de alquiler sería olvidar los años anteriores, cuando había faena, mucha faena, y en muchas zonas de España los precios estaban a un nivel bajo.
Hay que aprovechar esta crisis para estructurar el mercado con el fin de subir los precios de alquiler. El respeto de las zonas geográficas podría ser una de las soluciones.