Innovación y sostenibilidad, las claves de Genesal Energy para el futuro energético
La apuesta de Genesal Energy por la innovación y la sostenibilidad la ha convertido en un referente dentro del sector. El diseño de soluciones energéticas únicas y adaptadas a las necesidades del cliente es posible gracias a la inversión de recursos en investigación y nuevas tecnologías.
Desde hace tiempo, Genesal Energy, se esfuerza en conseguir una mayor protección del medioambiente en un mundo en el que el cambio climático y la degradación ambiental son temas prioritarios. Para ello, todas sus propuestas energéticas están orientadas hacia una energía eléctrica más limpia y en el que la innovación tecnológica adquiere un rol protagonista en el desarrollo sostenible.
La tecnología debe evolucionar hacia prácticas como el desarrollo de energías limpias, la creación de productos más eficientes o la implementación de prácticas menos contaminantes. La clave para alcanzar estos objetivos la encontramos en la innovación, en la búsqueda de nuevas formas de seguir satisfaciendo las necesidades de las actuales sociedades sin comprometer la salud del planeta.
Una energía eléctrica más limpia es sinónimo de empresas comprometidas con el medio ambiente e involucradas socialmente. Para ello, se está trabajando varias líneas de desarrollo futuro como son los combustibles sostenibles, los sistemas de gestión avanzados y la inteligencia artificial y que definimos a continuación.
Combustibles sostenibles: la columna vertebral del futuro energético
Genesal Energy cuenta con las certificaciones más importantes relacionadas con la reducción de la huella de carbono, la sostenibilidad y la gestión energética y medioambiental que garantizan su buen hacer. Lo que ha permitido ser una empresa pionera en la personalización de grupos electrógenos con los que consiguen resultados de alto calidad.
En este sentido, las principales alternativas que se están investigando son: el hidrobiodiesel o HVO, que se produce a partir de aceites vegetales y grasas animales y se obtiene mediante un proceso de hidrogenación, mucho más limpio que el diésel convencional. Cuenta además con una alta compatibilidad con la infraestructura existente de distribución como son los motores diésel actuales, siendo aplicable al transporte.
Otra de las grandes promesas la encontramos en el hidrógeno (H2) ya que este gas puede producir electricidad con agua como único subproducto, convirtiéndolo en una solución de cero emisiones. La adopción de hidrógeno como combustible puede contribuir significativamente a la descarbonización de sectores difíciles de electrificar, como el transporte pesado, la aviación y la industria.
El biogás, por su parte, es una mezcla de gases producidos por la descomposición de materia orgánica en ausencia de oxígeno componiéndose principalmente de metano (CH4) y dióxido de carbono (CO2) ayudando a realizar una gestión de los residuos más eficiente. De hecho, puede ser purificado para obtener biometano, que tiene propiedades similares al gas natural y puede ser utilizado en la red de gas existente.
Eficiencia energética: sistemas de gestión avanzados
Para maximizar los beneficios de cualquier fuente de energía, sea o no renovable, es crucial implementar sistemas de gestión energética avanzados. Estos sistemas permiten monitorizar, controlar y optimizar el uso de la energía en diferentes sectores, mejorando la eficiencia y reduciendo el consumo con una disminución de las emisiones.
Existen diversas maneras de mejorar la eficiencia de los sistemas de energía, entre ellas, destaca la aplicación de algoritmos de gestión que permitan ajustar de manera dinámica la producción y el consumo de energía en función de la oferta y la demanda. Por ejemplo, en sistemas de energía solar o eólica, dichos algoritmos pueden prever la disponibilidad de energía y adaptar la producción en consecuencia, optimizando el rendimiento y minimizando el desperdicio.
Además, en un contexto como en el que vivimos, en el que se busca aumentar la inserción de energías renovables en la red eléctrica, la combinación de los algoritmos de gestión con sistemas de almacenamiento de energía es especialmente relevante.
Además, recordemos que uno de los pilares de la transición energética es el aumento de micro-redes y de smart grids, donde se integran diversas fuentes de energía distribuida, sistemas de almacenamiento a pequeña escala y focos consumidores. Aunque no es sencillo gestionar todos estos elementos de manera eficiente y coordinada, los avances en algoritmos de control permiten facilitar esta tarea, permitiendo mejorar la estabilidad y fiabilidad de las redes.
Inteligencia Artificial: el motor de la sostenibilidad
A nivel tecnológico, la irrupción de la Inteligencia Artificial, ha permitido transformar los desafíos ambientales al ofrecer soluciones innovadoras y eficientes para reducir el impacto en el medio de las operaciones industriales. Si bien existen múltiples campos de aplicación de la IA en el sector industrial, es el mantenimiento predictivo un campo que tiene el potencial de alargar la vida útil de los equipos, reducir residuos y optimizar el consumo de recursos y reducción la cantidad de residuos generados.
Al supervisar el funcionamiento de los equipos utilizando técnicas de monitoreo en tiempo real, análisis de datos y tecnologías avanzadas, como la IA, para detectar los problemas antes de que sucedan o de que tengan consecuencias graves permite adelantarnos y tomar medidas preventivas, optimizando el gasto de materiales usados.