Retos y enfoques para la industria de la alimentación y las bebidas ante la crisis energética
Óscar Garrido, Business Development Iberian Industry director de Schneider Electric
18/07/2023La industria de la alimentación y las bebidas se enfrenta a grandes desafíos en el contexto actual de la crisis energética. La creciente demanda de energía, los cambios en el mix energético y la necesidad de reducir las emisiones de carbono plantean un panorama complejo. Esta complejidad y este entorno tan volátil puede paralizar nuestras decisiones, pero es fundamental tomar las decisiones adecuadas.
El binomio energía-sostenibilidad está ya muy presente en la agenda de todas las Administraciones Públicas, pero desde el sector empresarial también debemos abordarlo desde una visión holística y estratégica. La buena noticia es que existen soluciones y enfoques que pueden ayudar a superar estos retos y garantizar la continuidad operativa de las empresas del sector.
La gestión activa de la energía, clave para la competitividad
La competitividad de la industria europea se ha visto amenazada por los altos costes del gas y la electricidad. En España, el conjunto de la industria manufacturera destaca por ser el principal consumidor de energía (petróleo, gas y electricidad), sumando un 54% de la energía total, según CaixaBank Research. Esto significa una importante huella ambiental, que es necesario reducir, al igual que los asociados.
Sin embargo, incluso viendo el tremendo impacto que tienen en nuestras operaciones, la realidad es que aún son muy pocas las empresas capaces de saber cuál es el coste energético que ha tenido cada unidad de producto, o cuanta más energía van a necesitar en función de elegir una u otra máquina para su producción. En otras palabras, nos falta conocimiento y visibilidad sobre nuestra energía. Y esta visibilidad nos la dan los datos y una gestión activa de la energía.
El sector empresarial debe tomar el control de su energía para que pase a ser un activo más. Tomar el control implica, en primer lugar, hacer visible la energía, es decir, digitalizarla y poder explotar los datos.
Según los datos de la Agencia Internacional de la Energía, la industria puede ahorrar con la tecnología disponible hasta el 30% de la energía que consume con plazos de retorno de la inversión en la mayoría de los casos inferior a dos años. ¿Por qué la seguimos despilfarrando? La respuesta es sencilla: son muchas las empresas que no disponen de sus datos energéticos o carecen de las capacidades necesarias para poder interpretarlos. No puedes mejorar lo que desconoces. Necesitamos poder explotar nuestros datos operacionales y nuestros datos energéticos como un todo.
Mediante la monitorización y el análisis de los datos energéticos, es posible identificar áreas de mejora y tomar decisiones informadas para reducir el consumo y los costes. La implementación de soluciones de gestión de la energía, como los sistemas de supervisión y control, permite un seguimiento en tiempo real y un control preciso de los equipos y procesos energéticos.
Automatización universal
La automatización universal industrial se presenta como una herramienta clave para impulsar la eficiencia y la productividad en la industria de alimentación y bebidas. Mediante la implementación de sistemas de automatización y control, las empresas pueden optimizar sus procesos de producción, reducir el consumo de energía y sus costes. La automatización no solo mejora la eficiencia, sino que también proporciona la flexibilidad necesaria para adaptarse a los cambios en la demanda y en las condiciones del mercado.
A raíz de la proliferación de arquitecturas IIoT y la dificultad de resolverlas con estándares más tradicionales, surge la necesidad de una automatización universal basada en soluciones de software de automatización ‘plug-and-produce’ conforme a la norma IEC61499.
Durante décadas, la industria se ha visto obligada a trabajar dentro de las limitaciones de los tradicionales sistemas de automatización propietarios. A menudo, han tenido que elegir un proveedor con el que coexistir, aunque los sistemas y las máquinas vinculados con procesos más innovadores vinieran de múltiples proveedores. La automatización universal elimina estas restricciones, permitiendo construir las plataformas industriales sobre arquitecturas abiertas y basadas en datos.
Por este motivo, la automatización universal mediante estándares abiertos impulsa la innovación, la eficiencia, la resiliencia, la productividad, la agilidad y la sostenibilidad. Ofrece la agilidad necesaria para cambiar rápidamente las operaciones a medida que fluctúan las demandas del mercado y permite aprovechar nuevas oportunidades de negocio.
Flexibilidad de la demanda
La flexibilidad de la demanda energética es otro aspecto crucial para afrontar los desafíos de la crisis energética en la industria. Las empresas del sector de alimentación y bebidas pueden aprovechar su capacidad de ajustar su demanda energética en función de las condiciones del mercado y las fluctuaciones en la oferta de energía. La implementación de soluciones de gestión de la demanda energética permite a las empresas participar en programas de respuesta a la demanda, aprovechar los periodos de bajo coste energético y contribuir a la estabilidad del sistema eléctrico.
En este terreno, las microgrids jugarán un papel estratégico, especialmente en las plantas industriales, porque permiten generar, almacenar y gestionar la energía in-situ.
Las Microgrids no solo suponen una herramienta de gran impulso para la descarbonización de las empresas, sino que también les permite ser más competitivas, porque permiten planificar y gestionar sus procesos teniendo en cuenta tanto el precio como la disponibilidad de energía eléctrica. Es decir, las microgrids ayudan a optimizar los costes energéticos de la industria, lo que tiene un impacto directo en su cuenta de resultados.
El impacto que pueden tener las microgrids es enorme: si cogemos de referencia la microgrid que hemos instalado en Schneider Electric junto con Acciona en nuestra planta de Puente la Reina, de media somos capaces de autoabastecernos del 20% de la energía que necesita la planta, cifra que ha subido hasta el 80% en épocas estivales.
Es fundamental que la industria de alimentación y bebidas comprenda la importancia de la automatización industrial, la gestión activa de la energía y la flexibilidad de la demanda energética para enfrentar los retos de la crisis energética. Al adoptar estas soluciones y enfoques, las empresas pueden garantizar su continuidad operativa, reducir su impacto ambiental y mejorar su competitividad en un contexto en constante evolución.