Seminario 5: ‘El ovino del futuro: un sistema de producción +eficiente, +verde y +sostenible’

Un estudio encargado por el Parlamento Europeo para analizar la situación del bienestar animal en la legislación para poder implementar algunos cambios. Además, la nueva Comisión es muy activa y tiene diferencias con las anteriores, que tenían una parte de protección al ganadero, mientras que el nuevo equipo está más cerca del animal. Este estudio recoge que el eurobarómetro de 2016 indicaba que el 52% de los europeos buscan etiquetas de bienestar animal a la hora de hacer la compra, aunque solamente uno de cada diez sabía que existían esas etiquetas y que Europa es la zona geográfica mundial con mayor nivel de protección animal en sus producciones. En 2019, en un nuevo barómetro, se analizaron los intereses de los consumidores: origen (53%), precio (51%), seguridad alimentaria (50%), sabor (49%), contenido nutricional (44%) y aspectos religiosos (19%), que incluyen los productos ‘kosher’ y ‘halal’. Por lo tanto, en 2019 todavía no había un conocimiento ni un interés de la sociedad por el bienestar animal. A pesar de ello, se está legislando de forma muy activa.

Existen en Europa un buen número de referenciales de bienestar animal, con España a la cabeza (5), seguido por Países Bajos y Alemania (4), mientras que tienen dos Francia, Dinamarca, Italia, Suecia y Austria. Portugal tiene uno. Estos documentados son promovidos por iniciativas del sector privado (12), colaboración público-privada (9), asociaciones privadas (3) y públicas (3).

En noviembre de 2019, se realizó una reunión con los seis directores de las interprofesionales cárnicas para poner en marcha Compromiso Bienestar Animal, con el objetivo de ofrecer a la sociedad una herramienta unificada de bienestar animal, con las características de cada especie pero unas mismas directrices: una base científico-técnica en la redacción de los documentos, un comité científico independiente que dirige y revisa los documentos, un equipo técnico que lo escribe y las interprofesionales simplemente dan soporte. Así, en el mercado están los certificados de porcino y vacuno, mientras que el ovino y caprino lo ha lanzado en el año 2021.

Bienestar Animal Interovic España (BAIE) es una marca de garantía y certificación que tiene el objetivo de cumplir con los más altos estándares relativos al bienestar animal y a la trazabilidad. Es propiedad de Interovic, que lo pone a disposición del sector de forma gratuita.

El objetivo de BAIE es crear unas condiciones óptimas del bienestar animal, mejorando las condiciones ambientales y de manejo y evitando cualquier situación de estrés y sufrimiento innecesario. También se garantiza la mejora continua, por lo que se deben mantener o mejorar las evaluaciones cada año.

El alcance de BAIE es el más amplio del mundo, porque es el único que alcanza la producción de lechales y de cabritos, los centros de tipificación y cebaderos, todas las fases del proceso productivo, los controles en el punto de venta y la piel. También se está trabajando en la certificación de madres y lana.

El valor diferencial de este sello es que se basa en un control objetivo y repetible, basado en criterios científicos y técnicos. Se hace un seguimiento de unos 80 parámetros, con lo que se hace un reflejo real de la situación de una granja. Además, es factible, teniendo en cuenta el tipo y sencillez de una granja. Así, nos permite conocer las características del medio y el manejo del ganadero, además del estado y comportamiento de los animales.

Las fases de BAIE son las siguientes: control interno en explotaciones y empresas (mataderos y salas de despiece) con sistemas de autocontrol y que obligan a una mejora constante; controles imparciales de empresas auditoras habilitadas por ENAC; sistema de supervisión independiente, ya que estamos trabajando en un modelo de Certificación por tercera parte bajo acreditación. Los sistemas de certificación y control son transparentes. Es un sistema que aporta el máximo nivel de garantías al consumidor.

El proceso se ha iniciado por parte de Interovic, que comunica a granjas e industrias que tiene el certificado a su disposición. También está trabajando con las entidades de certificación para homologarlas y que puedan realizar auditorías periódicas. También está trabajando con ENAC para garantizar que el sistema de certificación sea un control objetivo y repetible.

Un buen número de organismos evaluadores de conformidad han pedido información con varios autorizados y se trabaja en acciones de promoción.

Se controlan los centros de tipificación y de cebo, que deben tener un código REGA, con animales de más de cinco semanas y un máximo de cinco meses, con una estancia mínima de 15 días. También se controlan los centros de lechales y cabritos, con código REGA y una edad de sacrificio alrededor de las cinco semanas.

La base del certificado es un sistema holístico. Se busca la relación del ganadero con el bienestar animal a través de varios puntos: comportamiento, sanidad, instalaciones, alimentación y gestión.

El sistema de evaluación se organiza en un sistema de bloques y en cada uno de ellos hay una serie de indicadores, con unas variables y una puntuación de cada variable, para lo que se necesita tener más de un 50% de puntuación.