Tomra Food muestra sus sistemas de alta precisión en Fruit Attraction

Tomra Food estuvo en el stand de su distribuidor de frutas y verduras en España, Luciano Aguilar presentando su nueva Tomra 3A, la clasificadora basada en sensores para tubérculos recién cosechados. También dio a conocer la aplicación de zanahorias en su plataforma Halo, una máquina que ha tenido una gran acogida en España y Portugal durante 2019.

Tras la feria, Alejandro Palacios, director de Ventas de Tomra Food para España y Portugal, confirmó que sus expectativas para esta cita se han visto cumplidas: “En Fruit Attraction 2019 hemos consolidado nuestra posición en los sectores donde estamos más enfocados últimamente: el producto entero (zanahorias, patatas); las patatas fritas, donde estamos haciendo mucha fuerza; y los frutos secos, donde Tomra sigue siendo líder indiscutible”.

Para el mercado de producto entero, que es realmente importante, la Sentinel II, la Halo, la Tomra 3A y la Tomra 5A, tienen cada vez una mayor demanda por parte de los productores de vegetales. Así, la Tomra 5A, ofrece una tasa de eliminación de objetos extraños del 98% y expulsa de la cinta de alimentación material no deseado como piedras, raíces, madera, vidrio, plástico, pelotas de golf y metal. Por su parte la clasificadora de patatas Tomra 3A, destaca por su mayor capacidad (30% más que en el modelo anterior) y ofrece también la posibilidad de detectar patatas enverdecidas, gracias a su sistema de imagen capaz de detectar el color y su mayor facilidad de uso y mantenimiento hacen de este modelo un referente a partir de ahora. Su sistema óptico, que no tiene piezas que se muevan mientras está en funcionamiento, mejora su fiabilidad y destaca también la cuidadosa manipulación de la patata, característica fundamental en las clasificadoras Tomra, ya que los eyectores de dedos mecánicos están diseñados para evitar la colisión con las patatas cercanas al caer en la zona de producto aceptado.

Alejandro Palacios con el equipo de Luciano Aguilar.

La clasificadora Halo es perfecta para una gran variedad de frutas y verduras. En la actualidad, se está convirtiendo en la máquina todo terreno para el sector de las zanahorias, que está experimentando un cambio en los últimos tiempos.

“Cada vez la gente quiere zanahorias de mejor calidad, algo difícil lograr de forma manual. Aunque los productores han estado mucho tiempo trabajando de esa manera, ha aumentado el consumo de vegetales crudos y los estándares de los supermercados son más exigentes”, afirma Alejandro Palacios. Otro factor determinante para el éxito de este producto es que “los productores comentan que cada vez es más difícil encontrar gente que quiera trabajar en las campañas”, añade Alejandro Palacios.

El nuevo proceso con la Halo es el siguiente: las zanahorias sucias llegan a los lavaderos; las limpian; las pulen con unos rodillos; después, pasan a una mesa de inspección manual donde separan las defectuosas (podridas, con manchas, deformes, rotas, etcétera). Teniendo en cuenta que la parte de la selección ocupa un 90% del trabajo, es lógico suponer el ahorro de tiempo y el incremento de precisión que brinda que lo realice la Halo.

“Es una máquina que hace todo el trabajo de forma uniforme y constante a lo largo del día con el mismo criterio. Es capaz de hacer producciones muy altas (en el caso del modelo 1500, que es el más demandado, de 13,5 toneladas por hora). Además, se diferencia del resto de equipos, fundamentalmente, en que Halo es una selectora. Hay equipos que calibran y seleccionan, pero la nuestra es una todoterreno: está diseñada para trabajar en ambientes con agua, sucios, tiene limpieza automática, el sistema de inyección es muy preciso… Hace toda esa limpieza previa a que el producto entre a las líneas de manipulación”, afirma Alejandro Palacios.

En cuanto a la tendencia a la inversión y al crecimiento, como expone Alejandro Palacios, “la tendencia es que el mercado cada vez realice mayores inversiones, no solo en producto entero, sino en todo tipo de productos. Esto ocurre no solo en las empresas grandes, o las medianas-grandes. También las pymes se están planteando la inversión. Lo notamos en el área de las patatas fritas: muchos negocios locales con producción de patata artesana están dando el paso a la inversión en selectoras ópticas, ya que su producto también ha entrado en la cadena de distribución. El aumento de marcas blancas de patatas de churrería implica que el resto tenga que alcanzar esos estándares de calidad”.

El mercado de los frutos secos continúa creciendo este año 2019 y la clasificadora para este producto, Nimbus BSI+, tiene una altísima demanda. “Este año hemos vendido unas 14 máquinas”, subraya Alejandro Palacios.

“Aunque hay bastante variedad de aplicaciones en las que estamos presentes actualmente, la tendencia, en definitiva, es seguir creciendo. Y gracias a nuestras nuevas soluciones de clasificación, creo que este crecimiento será exponencial en el producto entero”, concluye.