Aprobada la Ley de Gestión y Ciclo Urbano del Agua en Extremadura
La Asamblea de Extremadura aprobó el 23 de febrero, “por amplia mayoría”, la Ley de Gestión y Ciclo Urbano del Agua en Extremadura. Es la primera de este tipo en cuarenta años de autonomía en la región. Se trata, apuntan fuentes del Ejecutivo autonómico, de un texto legal que regula un recurso medioambiental y económico vital para muchos sectores productivos.
Según la consejera para la Transición Ecológica y Sostenibilidad de la Junta de Extremadura, Olga García, “esta ley reconoce a todos los extremeños el acceso al agua y al saneamiento como un derecho humano y garantiza una prestación de calidad de estos servicios, independientemente de dónde vivan”.
Con la nueva legislación también se reconoce a los entes supramunicipales “como herramientas necesarias para garantizar la sostenibilidad de las poblaciones de menor tamaño ante la falta de recursos técnicos y económicos”. Además, la ley “impulsa una gobernanza compartida entre todas las administraciones que tienen competencias en materia de agua”.
La nueva norma apuesta por la transparencia, la planificación y la participación pública y destaca especialmente en su contenido la importancia de la planificación de infraestructuras, de forma que cada seis años debe elaborarse un plan regional en coherencia con la planificación hidrológica asegurando la viabilidad técnica, ambiental, social y económica de las obras hidráulicas que ejecute la Junta de Extremadura.
García calificó esta ley “como una norma moderna y consecuente con la necesidad de afrontar el cambio climático”. Además, describió la norma como “muy positiva para Extremadura y los extremeños, porque nos da herramientas para defender y aprovechar mejor este patrimonio común que es el agua”.