Feragua muestra su satisfacción con las medidas tomadas por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir para las zonas regables del río
28 de mayo de 2014
La Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua) defendió en el seno de la Comisión de Desembalse del Guadalquivir una campaña de dotaciones óptimas, sin restricciones, propuesta que ha sido aprobada con el apoyo de todos los miembros de esta Comisión ante la óptima situación hidrológica de las embalses de la cuenca, que se encuentran en la actualidad al 90% de su capacidad de embalse.
Después de un otoño-invierno e inicio de primavera medio, los embalses se encuentran en una situación de óptimo llenado, habiéndose atendido todas las demandas de riego de los meses de abril y mayo y habiéndose llenado las tablas del arroz, aprovechando en gran parte las escorrentías generadas por las lluvias de primavera.
La presidenta de Feragua, Margarita Bustamante, manifestó que “los regantes gestionarán, no obstante, esas dotaciones con responsabilidad, realizando un uso eficiente y austero del agua, que permita el máximo ahorro posible del recurso, como viene siendo además la tónica en los últimos años”.
La presidenta de los regantes andaluces aplaudió también la autorización de otras peticiones realizadas por su Asociación, y concretamente el funcionamiento del sistema único del margen izquierdo del sector arrocero, tal y como ha funcionado en años anteriores; la autorización de riego extraordinario del arroz; la autorización de riego extraordinario en toda la cuenca de 1.000 hm3/ha; la autorización de riegos de emergencia para superficies de regadío en precario limítrofes con zonas regables; y la prolongación de la temporada de riego hasta octubre para el completo desarrollo de los cultivos implantados.
Margarita Bustamante, de la misma forma, solicitó al presidente de la Confederación la necesidad de abaratar los costes de la Breña II y Arenoso, que pasan por ampliar la amortización de las obras a 50 años, reducir costes ambientales y bajar los gastos de gestión, cuestión que va necesariamente unida a que los embalses estén directamente tutelados por la propia Confederación y no por la sociedad estatal Acuaes, que presenta unos gastos de gestión absolutamente insostenibles.
