Cornellà, sede de un revolucionario proyecto europeo para depurar aguas industriales
13 de noviembre de 2012
El proyecto Waterplasma desarrolla un proceso de tratamiento del agua basado en la construcción de un reactor de plasma atmosférico que permite eliminar moléculas complejas. A diferencia de los tratamientos convencionales, el Waterplasma no está basado en procesos físico-químicos o biológicos, cuya eficiencia es muy limitada a la hora de eliminar algunas sustancias xenobióticas recalcitrantes (las sustancias que habitualmente se encuentran en aguas industriales y que son difíciles de eliminar).
El proyecto Waterplasma es una iniciativa que nació en una empresa portuguesa y que, co-financiada por la Comisión Europea, se ha desarrollado en el Centre de Recerca i Innovació de Catalunya (CRIC), en Cornellà, junto con la empresa Laboratoris Espinós i Bofill (Lebsa), ubicada también en Cornellà de Llobregat (Barcelona). Una vez se haya construido el prototipo, en diciembre de 2012, se instalará en la sede de Lebsa para mejorar así los procesos de tratamiento tanto a nivel económico como medioambiental.
Con esta nueva tecnología, la industria ganará en eficiencia a la hora de tratar sus aguas residuales y los ciudadanos se beneficiarán porque se suprimirán compuestos que antes no se podían eliminar, garantizando así la pureza del agua.
En términos numéricos, la tecnología Waterplasma será capaz de procesar 250 dm³ por hora de forma continuada; reducir hasta un 90% la presencia de compuestos recalcitrantes; no utilizar tratamiento químico y ahorrar energía, además de abaratar costes asociados.
Desarrollado y coordinado desde el CRIC de Cornellà, el proyecto Waterplasma cuenta con 3 centros de investigación y 4 empresas participan en el desarrollo de la tecnología. Además de los fondos europeos, la investigación suma esfuerzos de un total de 7 organizaciones en 5 estados: España, Portugal, Reino Unido, Alemania y Rumanía.