Primer balance del Proyecto INTEGRA, Mujeres de las Cooperativas y Liderazgo Empresarial
1 de marzo de 2012
El proyecto Integra, cofinanciado por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, FEADER y Cooperativas Agro-alimentarias, es un proyecto experimental que dio comienzo en 2011 con el objetivo de apoyar la mejora de la participación de las mujeres en los ámbitos de toma de decisión de las cooperativas y visibilizar su participación en las cooperativas del medio rural. El proyecto Integra pretende impulsar la participación de las mujeres en los ámbitos de decisión de las cooperativas a través de un programa de estímulo del liderazgo y de implantación de medidas innovadoras en un grupo de cooperativas. El carácter plurianual del proyecto ha permitido definir distintas fases de intervención de las cuales la primera ha sido la realización de un estudio-diagnóstico para conocer la situación de las cooperativas agrarias en relación con la igualdad de género y la posición de las mujeres en las mismas.
Los principales datos cuantitativos obtenidos a través del cuestionario, nos indican que las mujeres participan en un inferior porcentaje como asociadas (25,45%) en las cooperativas, y su presencia disminuye en las de segundo grado (18,06%), así como en las que tienen mayores cifras de negocio y en las de ámbito urbano. Las asambleas se configuran como espacios masculinizados, en los que la asistencia de mujeres es escasa y supone un porcentaje menor aún que como asociadas (13,9%). El porcentaje sigue cayendo al analizar la presencia femenina en los órganos de representación, pues suponen solamente un 3,5% de las personas participantes en los Consejos Rectores, y en las cooperativas de segundo grado tan sólo alcanza el 2,26%.La diferente participación de mujeres y hombres en los órganos rectores se aprecia también en el tipo de puestos desempeñados, de tal forma que las mujeres apenas poseen representación en los puestos de presidencia (1,75% del total de cargos de Presidencia) y de vicepresidencia (un 2,17%).
Como aspecto positivo a destacar, el estudio constata que la edad media de las mujeres asociadas y de las participantes en los Consejos Rectores es inferior a la de los hombres, lo que nos indica que el proceso de incorporación de las mujeres a las cooperativas es reciente y su evolución puede ser positiva. Otros aspectos reseñables son la escasa utilización de la figura de la cotitularidad (que no llega al 12%), así como la escasa presencia de medidas de conciliación de la vida laboral, personal y familiar para las personas asociadas a las cooperativas (solamente un 2,84% de las cooperativas poseen programas de sustitución o respiro y un 37,5% de las asambleas se celebrar en horario nocturno).