Alta eficiencia de las placas calefactadas eléctricas de plástico
Jordi Gasull. Técnico de Rotecna.
26/12/2023En este estudio se ha analizado el consumo de distintos modelos de placas calefactadas en función del material de fabricación. Concretamente, se han comparado las placas calefactadas de Rotecna, fabricadas en plástico (1200x500 mm con sonda), con otro modelo del mercado fabricado con polímero recubierto con chapa de acero inoxidable (1200x500 mm con sonda).
En la prueba, se instalaron dos grupos de placas y se tuvieron funcionando a una misma temperatura demandada (34 °C) con termostatos idénticos y en la misma sala con iguales condiciones ambientales para realizar un seguimiento del consumo acumulado. Las placas se controlaron con un termostato con sonda superficial (encendidas a 100% del voltaje por debajo de la temperatura objetivo y apagadas cuando se llega a la temperatura objetivo).
El registro de datos se realizó durante un periodo de 21 días, en los que ambas placas funcionaron en iguales condiciones ambientales y con la temperatura ajustada a valores similares en los dos modelos.
Condiciones de la prueba:
- Temperatura ambiente: Aproximadamente 21 °C.
- Temperatura requerida: 34 °C.
- Duración del registro de datos: 7 días.
Tras los primeros 6 días y 15 horas de funcionamiento, la diferencia de consumo energético registrada fue de un 23% menor con la placa de plástico de Rotecna, cuyo consumo registrado fue de 5,55 kWh (lo que representa un consumo medio horario de 34,7 Wh), mientras que el de la placa de polímero recubierta de acero inoxidable fue de 7,25 kWh (45,3 Wh de media).
En resumen, durante la prueba, comparando estrictamente el producto sin alterar el funcionamiento con distintos sistemas de regulación para cada modelo, mismo regulador y sonda tomando temperatura superficial en ambos casos, el resultado ha sido siempre favorable a la placa de Rotecna.
Entendemos que, entre otras diferencias, la placa metálica actúa como un radiador, transmitiendo más el calor al ambiente, por lo que es menos eficiente desde un punto de vista energético para mantener una temperatura constante.
Regulación con sonda vs potenciómetro
Para este ensayo se montaron dos placas Rotecna eléctricas de 1200x500 mm de 150 W, que funcionaron simultáneamente con la superficie libre y en la misma sala para asegurar que las condiciones ambientales fuesen las mismas para ambos modelos a comparar. El regulador manual sin sonda se ajustó hasta obtener una temperatura superficial que coincidiera con la temperatura superficial deseada en la otra placa a comparar (regulador en posición a 70%). Para el termostato con sonda, se comprobó que la temperatura detectada por la sonda coincidiese con la temperatura real de la superficie de la placa.
En el momento de empezar con el registro de consumos, ambas placas tenían la misma temperatura de superficie en el mismo punto.
Condiciones de la prueba:
- Temperatura ambiente: Aproximadamente 21 °C.
- Temperatura requerida: 36 °C.
- Duración del registro de datos: 7 días.
Tras la prueba y el análisis de datos, pudimos concluir que los resultados de consumo de las placas son muy similares. Sin embargo, la sonda ofrece la capacidad al sistema de autorregular la temperatura, mientras que el sistema sin sonda requiere de una regulación manual. En la práctica, en granja, esto puede conllevar un ahorro de hasta el 5% por el ajuste más preciso de la temperatura con sonda que al hacerse manualmente, según el comportamiento de los animales. Por otra parte, el ahorro puede alcanzar hasta el 35% con la sonda, ya que las placas se apagan automáticamente cuando los animales generan suficiente calor para mantener la placa a la temperatura deseada, al estar sobre una superficie perfectamente aislada. Además, se puede aplicar una curva de temperatura en la placa a medida que los lechones crecen. Cabe destacar que las placas fabricadas con materiales muy conductores no se deberían apagar nunca, ya que a temperatura ambiente siempre absorberán calor de los lechones.
Bienestar y confort de los lechones
El tacto de la superficie, la distribución de la temperatura, la estanqueidad, la ligereza y el sistema de sujeción de las placas de plástico son algunas de las ventajas de seguridad, confort y bienestar que aportan frente a otros materiales más porosos, pesados y que disipan más el calor.
Ventajas de las placas de plástico vs las de polímero:
- Requieren de una cantidad menor de energía para alcanzar la temperatura de trabajo.
- Disipan mucho menos calor al ambiente, especialmente si no se usa nido.
- Tienen una excelente inercia térmica, por lo que apenas varían la temperatura en los periodos que los lechones van a mamar, lo que facilita su regulación.
- Al ser aislantes, no absorben calor de los animales aunque estén apagadas, por el diseño de la resistencia.
- Distribuyen la temperatura por la superficie de una forma más homogénea.
- Disponen de una superficie con mejor agarre para las patas de los animales.
- Proporcionan una superficie con mejor confort para el descanso.
- Cuentan con un sistema de soporte, sin rincones donde se acumule la suciedad, lo que facilita la limpieza.
- Peso más ligero, entre 3,5 y 9,5 kilos. En cambio, las placas de hormigón llegan a pesar más de 30 kilos.