Tecnologías inalámbricas para seguir el viñedo en tiempo real
Para tener una imagen real de lo que pasa en el viñedo con esos factores, es necesario medir en numerosos puntos. Pero, ¿cómo monitorizar en tantos sitios distantes unos de otros? La solución la dan las redes inalámbricas de sensores, que hacen posible tener un número elevado de puntos de medida en el viñedo sin necesidad de instalar ni un solo cable.
“Las tecnologías inalámbricas son la única forma de instalar en campo cualquier tipo de sistema, ya que las extensiones de terreno que se manejan hacen inviable cualquier otra forma de instalación”, afirma Jorge del Valle, director de Galtel, empresa especializada en la aplicación de estas tecnologías para monitorizar viñedos.
Prueba de la aplicación de estas tecnologías la tenemos en el uso que de ellas hace Bodegas CaminoAlto, que durante la campaña 2010 ha controlado el estado del viñedo con un sistema de red inalámbrica de sensores, monitorizando en tiempo real diversos parámetros del suelo y del clima, bajo la supervisión técnica de Galtel.
El sistema, implantado inicialmente en una superficie de 5 ha, mide la humedad del suelo a distintas profundidades en tres puntos del viñedo, además de monitorizar parámetros ambientales (temperatura y humedad relativa). Los datos recogidos se envían a un servidor instalado en la propia finca, alimentado mediante un sistema solar fotovoltaico de baja potencia. Los datos se pueden consultar desde cualquier lugar con conexión a Internet.
Este tipo de sistemas permite que el usuario final no tenga que estar continuamente pendiente de las medidas de los sensores, ya que la propia red envía un E-mail cuando se produce alguna situación fuera de lo esperado, avisando, por ejemplo, de que la humedad del suelo es muy baja y es necesario regar.
En próximas campañas se ampliará el número y tipo de sensores de la red, pudiendo controlar parámetros como el grosor del tronco, la humedad de las hojas o parámetros climáticos completos (radiación solar, lluvia, viento, etc.).
Según Jorge del Valle, “la verdadera potencia de este sistema la tendremos en las próximas campañas, ya que el sistema ha estado aprendiendo y guardando datos durante esta campaña y en la próxima usará toda la información histórica recopilada para avisarnos, por ejemplo, de los momentos óptimos de riego en cada parcela”.
Este control preciso de parámetros tiene su ventaja también desde el punto de vista medioambiental y de reducción de riesgos de la cosecha. Por un lado, el análisis de datos históricos permite al sistema evaluar la posibilidad de ocurrencia de determinadas enfermedades del cultivo, avisando al viticultor para que tome las medidas oportunas. Y por otro, el conocimiento preciso de qué ocurre en cada sub-parcela permite ajustar las prácticas agrícolas a la necesidad concreta de la planta y del suelo en cada punto, evitando, por ejemplo, que se “malgaste” agua de riego y fitosanitarios que pueden terminar filtrándose en acuíferos subterráneos porque la planta no ha sido capaz de absórbelos en su totalidad.
Galtel, la empresa que ha implantado este sistema, es una empresa de ingeniería especializada en la aplicación de tecnologías inalámbricas para agricultura, con una visión de constante evolución e innovación de los procesos agrícolas utilizando nuevas tecnologías.
Bodegas CaminoAlto, situada en la localidad toledana de Villacañas, elabora vinos de producción ecológica, combinando tradición, innovación y respeto al medio ambiente para elaborar caldos a partir de uva de sus propios viñedos.