Por ahora no se puede predecir qué combustible será el 'ganador' en el sector agrícola

La jornada ‘Evolución de la propulsión en maquinaria agrícola’, realizada en el marco de EIMA 2022 y organizada por FederUnacoma, contó con la participación de algunos fabricantes de motores. En el encuentro se hizo balance de las soluciones tecnológicas propuestas por los fabricantes para reducir las emisiones contaminantes y las posibles líneas de desarrollo para el futuro.

Para contener el impacto del cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, la Unión Europea ha adoptado un paquete de medidas muy ambicioso. De hecho, la hoja de ruta establecida por la Comisión prevé que los contaminantes se reduzcan en un 55 % para 2030 y luego alcancen el objetivo de 'cero emisiones' para 2050, y esto exige a los fabricantes de motores un gran esfuerzo de diseño destinado a crear una propulsión con cada vez menos impacto en el medio ambiente.

El Reglamento de Emisiones vigente que introdujo la Fase V, enfatizaron los ponentes, ya garantiza una reducción significativa de las emisiones contaminantes. Sin embargo, el Pacto Verde establece nuevos objetivos encaminados a seguir mejorando la sostenibilidad. Estos objetivos se pueden lograr siguiendo diferentes caminos: utilizando combustibles de ‘impacto cero’, renovables o fósiles ‘alternativos’.

Diego Rotti, Head of Off-Road Product Portfolio & Marketing FPT Industrial, presentó las principales tecnologías desarrolladas por su empresa para optimizar el impacto ambiental de los motores. Además de los sistemas de propulsión de biometano, estas soluciones también incluyen tecnologías híbridas y de hidrógeno.

Según Mauro Mancuso, Gerente Senior y Marketing de Producto de Kohler, los motores totalmente eléctricos se utilizarán principalmente para el transporte público y la logística ‘in house’, mientras que la tecnología híbrida se explotará en el transporte regional, la construcción y el manejo de materiales. Los motores térmicos, por su parte, seguirán predominando en las aplicaciones agroforestales, en el sector de la construcción y en el transporte de larga distancia. La tecnología completamente eléctrica es una prioridad en la estrategia de Kohler, remarcó Mancuso, ya que su difusión a gran escala se ve dificultada tanto por la capacidad de las baterías (todavía reducida) como por la proximidad de la infraestructura de carga.

Quien apuesta decididamente por la electrificación es CNH Industrial, que, como ilustró Stefano Fiorati (Zero Emission & Advanced Drivetrain Manager CNHi), ya ha fabricado vehículos totalmente eléctricos. Entre ellos, una miniexcavadora, cuyas baterías, gracias a la tecnología de carga rápida, pueden recargarse en un 80% en tan solo una hora. El proceso de electrificación no solo concierne a los tractores, sino también a los equipos. De hecho, en los últimos años, un número cada vez más notorio de fabricantes ha desarrollado maquinaria con sistemas de suministro de energía (eléctricos) independientes del tractor. El sistema desarrollado por New Holland, explicó Fiorati, prevé un generador e-Source externo que, activado por la toma de fuerza del tractor, alimenta los equipos eléctricos.

De momento, y más allá de las diferentes alternativas disponibles hasta ahora, no es posible predecir cuál será el combustible que saldrá ‘ganador’ de esta carrera, porque cada uno presenta actualmente ventajas y limitaciones, en función de diferentes factores. Así lo reconocieron también otros expertos consultados durante el evento.