El nuevo Reglamento sobre Fitosanitarios bajará la toxicidad y reducirá la cantidad de producto usado
13 de mayo de 2010
Coincidiendo con el VII Foro Mundial del Vino, ha tenido lugar una ponencia sobre el nuevo Reglamento de la Unión Europea en cuanto a comercialización de productos fitosanitarios. El nuevo marco normativo europeo para la comercialización y uso de plaguicidas “tendrá las ventajas de reducir la cantidad de materia activa aplicada por hectárea, lo que redundará en una mayor seguridad del agricultor y en una disminución de la toxicidad para el aplicador, los animales y el medio ambiente, además de que avanzaremos hacia productos más específicos para cada parásito”, ha señalado José Luis Pérez Marín, coordinador nacional del Grupo de Trabajo de los Problemas
Fitosanitarios de la Vid y jefe de sección de Protección de Cultivos de
la Consejería de Agricultura de La Rioja. En cuanto a inconvenientes de este marco normativo europeo, José Luis Pérez también ha hecho referencia a algunos: “Se va a reducir considerablemente el número de productos disponibles, al desaparecer muchos genéricos, factores ambos que podrían derivar en un aumento del coste de dichos productos”. Además, y a modo de resultado de la mayor especialización de los fitosanitarios, el ponente apuntó hacia el “posible riesgo de aparición de resistencias de determinadas plagas y enfermedades”.
El nuevo Reglamento de la UE sobre la comercialización de productos fitosanitarios, aprobado por el Parlamento Europeo en enero de 2009, plantea unos criterios de exclusión de determinados productos que se aplicaban en la Unión Europea según factores tóxicos, contaminantes o bioacumulativos, entre otros. Con la llegada del año 2011, se iniciará la revisión de los mismos, y a la vez se pondrán sobre la mesa cuatro soluciones para los fitosanitarios vigentes: los excluidos se retirarán del mercado y se podrán utilizar por los agricultores únicamente en los 18 meses siguientes; los autorizados, en vigencia de uso durante 15 años; las ‘materias activas con dudosa sustitución’, en posible situación de exclusión pero que se autorizan durante siete años más por no existir otro producto que las sustituya, y finalmente, los excluidos que se podrán acoger a una excepción normativa cuya vigencia de uso será de cinco años. De un total de 222 materias activas analizadas en el Reglamento, 11 afectan a los tratamientos en viñedo. Entre los productos excluidos en este ámbito, destacan el ‘mancozeb’, muy usado en tratamientos contra hongos (Mildiu, por ejemplo) y los utilizados como herbicidas, la mayoría se excluirán y tan solo se conservarán tres materias activas en preemergencia y solo el ‘glifosato’ en postemergencia. “Los productos fitosanitarios han estado siempre controlados y todo producto bien aplicado no tiene por qué causar ningún problema. Lo que hace falta es que se respeten los consejos de aplicación de cada fabricante y los plazos de seguridad”, ha puntualizado José Luis Pérez.