Presentación de la Plataforma Tecnológica de la Agricultura Sostenible, bajo una visión integradora del sector
27 de abril de 2010
“Este tipo de plataformas resultan extremadamente acertadas para acercar el trabajo agrícola a la sociedad civil”. Así hacía referencia Josep Puxeu, secretario de Estado de Medio Rural y Agua, a la Plataforma Tecnológica de la Agricultura Sostenible durante su inauguración y primera jornada de trabajo el pasado 25 de marzo. Al acto asistieron portavoces de los Ministerios de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM) y de Ciencia y Tecnología. El evento se dividió en dos sesiones: la primera, de lanzamiento de los tres grupos de trabajo que estructuran esta organización: agricultura, ganadería y tecnologías; la segunda, de presentación de la misma, con la intervención de Juan Tomás Hernani, secretario general de Innovación.
Financiada por el Ministerio de Ciencia e Innovación, esta asociación persigue una visión común de la agricultura, basándose en la tecnología y la sostenibilidad para así responder a los retos que la sociedad plantea al sector. Sostenibilidad como criterio básico a la hora de satisfacer las necesidades actuales de la ciudadanía (alimentos, sanidad, trazabilidad), maximizando la eficiencia productiva y minimizando los recursos empleados. La organización nace a instancia de 16 asociaciones sectoriales vinculadas al medio agrícola y rural: Accoe, Aepla, Ancoporc, Afre, Anffe, Anove, Anprogapor, Ansemat, Aseprhu, Asocarne, Asoprovac, Cesfac, Conacun, Cooperativas Agroalimentarias, Unistock y Veterindustria. Asimismo, cuenta con la colaboración del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA), el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM) y la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos de Madrid (ETSIA). De esta manera, y bajo el auspicio de la sostenibilidad y la transferencia tecnológica al medio agrícola y rural, se logra reunir, por primera vez, en la misma mesa a muchos de los agentes del sector: asociaciones, centros tecnológicos, empresas, estamentos públicos o universidad.
Los tres grupos que vertebran la plataforma, uno a uno
La macro estructura de la Plataforma Tecnológica de la Agricultura Sostenible se divide en tres grupos de trabajo principales. En primer lugar, el grupo agrícola formado, a su vez, por cuatro subgrupos: semillas y mejora vegetal; protección de cultivos y sanidad vegetal; suelos y fertilización y mecanización. El trabajo del mismo se concreta principalmente en: identificar los sistemas productivos más eficientes, definir proyectos que vinculen las soluciones tecnológicas más adecuadas y su adopción e informar acerca del uso de tecnologías. En segundo lugar, el grupo ganadero y cárnico pretende evaluar los sistemas actuales de producción ganadera y cárnica para identificar aspectos claves de posibles mejoras en la eficiencia productiva. Sus áreas de trabajo serán, básicamente, la mejora genética, la alimentación animal, la sanidad animal, el bienestar animal y la gestión de residuos. El último grupo, el de tecnologías, valora las existentes a fin de mejorar la eficiencia productiva, el tratamiento de residuos, etcetera.
Tecnología y trabajo para afrontar el futuro del medio agrícola y rural
Además de establecer un espacio donde crear sinergias entre todos los actores de la producción agrícola, esta iniciativa multisectorial promueve la investigación en la eficiencia productiva sostenible. ¿Cómo lograrlo? A través de la tecnología y el trabajo. Por un lado, tecnología siempre que esta permita producir más con menos recursos, siendo más rentable y productivo a la vez. De igual modo, el uso de nuevas tecnologías hará posible que el sector agrario afronte desafíos que se le presentarán en los próximos años: minimizar el impacto ambiental, racionalizar el uso del agua o lograr el autoabastecimiento energético. Todo ello, mejorando el autoabastecimiento de productos agrícolas, lo que reduciría la volatilidad de los mercados, la mejora de los estándares de calidad y, en definitiva, el mantenimiento y fijación de la población rural, gracias al crecimiento del trabajo agrícola, forestal y sus industrias. Por otro lado, el trabajo visto desde una perspectiva global, inspirándose en la aplicación de factores comunes a todos los agentes del medio, ya sean fertilizantes, semillas, maquinaria agrícola, ganaderos, por ejemplo.
En general, la gran variedad de factores que determinan el sector agrícola se podrían resumir en tres facetas principales: económica, medioambiental y legislativa. Toda actividad agrícola es, en sí misma, una actividad productora, y por lo tanto, también empresarial. A su vez, contiene una vertiente medioambiental, debido al medio en el que se desarrolla y a las exigencias que supone su cuidado. Por último, el hecho de pertenecer a la Unión Europea influye en que, en ocasiones, las leyes europeas no conozcan ni se adapten a las realidades nacionales. En consecuencia, el marco legislativo también afecta al sector. Para adaptarse a estos factores, es necesario trabajar en tres vías. La primera, sería la transversalidad derivada de trabajar entre grupos heterogéneos con una participación desigual en la cadena de valor agrícola. La segunda, haría referencia a la trazabilidad, conociendo el origen y el valor de lo producido. Y por último la transferencia de conocimientos derivados y obtenidos del trabajo dirigidos a los actores que desarrollan nuevos sistemas de trabajo y también a los ciudadanos, de manera que conozcan el valor real de los alimentos que consumen.