Cooperativas pide un acuerdo sobre la PAC en España "lo antes posible" para dar estabilidad al sector productor
Cooperativas Agro-alimentarias de España apremia al Ministerio y a las Comunidades Autónomas a que determinen lo antes posible el Plan Estratégico de la PAC para que las cooperativas y las explotaciones de sus agricultores y ganaderos socios y socias puedan contar con un marco regulatorio estable hasta 2027.
Desde Cooperativas Agro-alimentarias de España valoran que la propuesta del MAPA tenga en cuenta la especificidad del modelo cooperativo en la aplicación del capping, del pago redistributivo y de la ayuda a jóvenes. Esperan asimismo que tal y como anunció el ministro, Luis Planas, los trabajos técnicos avancen y se pueda cerrar la negociación con las CC AA.
La nueva PAC que entrará en vigor a partir de 2023 es mucho más ambiciosa desde el punto de vista medioambiental, y esa ambición se verá incrementada por la aplicación de los objetivos de las estrategias de la Granja a la Mesa y para la Biodiversidad 2030.
Tal y como ha destacado Ángel Villafranca, presidente de Cooperativas Agro-alimentarias de España, “el cambio a un modelo medioambiental en la producción agrícola y ganadera, no podrá darse sin tener en cuenta la rentabilidad del sector productor, que vendrá de la mano de las cooperativas, la mejor herramienta para conseguir los objetivos que marca el Pacto Verde de la UE”.
A ello se añade la publicación ayer por la Comisión Europea del paquete Fit for 55, que lanza un conjunto de iniciativas reglamentarias sin precedentes en la UE, para conseguir la reducción del 55% de los gases de efecto invernadero para 2030, lo que implicará importantes esfuerzos y adaptaciones para los sectores económicos, entre ellos el sector productor agroalimentario, y en el comportamiento de los ciudadanos.
Según han expresado desde Cooperativas Agro-alimentarias, "para alcanzar los objetivos es necesario aplicar políticas económicas coherentes con instrumentos que estructuren los sectores dentro de la PAC, invertir en el sector productor y dar tiempo a la adaptación, conseguir la reciprocidad total con las importaciones a la UE para no perder competitividad, y ayudar a las explotaciones a aplicar la innovación y digitalización necesaria a través de servicios de asesoramiento profesionales, donde las cooperativas agroalimentarias y los enfoques colectivos jugarán un papel clave, evitando que nadie se quede atrás y el abandono y cierre de las explotaciones familiares, base de la sostenibilidad económica, social y medioambiental del sector".