Aeded analiza las tendencias en maquinaria e implementos para demolición y reciclaje

La Federación de Gremios de la Construcción, en colaboración con la feria Smopyc, iniciaron el 11 de junio un ciclo de webinars, con una primera entrega titulada 'Evolución y tendencias en maquinaria e implementos para demolición y reciclaje', impartida por tres prestigiosos miembros de la Asociación de demolición, descontaminación, corte y perforación, Aeded: Javier Llorente, director de Ability Maquinaria y Medio Ambiente, Fernando Sanz, responsable comercial de ITT Bobcat Of, y Unai López, delegado en la zona Norte de Arden Equipment. Luis Fueyo, director de Smopyc, ejerció de moderador.

Todos los ponentes coincidieron en afirmar que el 2020 fue un año de “transición e incertidumbre” para el sector de la demolición y reciclaje, con un arranque de ejercicio muy positivo pero que se vio truncado por la inesperada irrupción de la pandemia. Tras varios meses de paralización de actividad y de cierto miedo entre proveedores y clientes, desde el verano ya se apreció una tímida recuperación, que se vio acentuada en el último trimestre. Todo ello hizo que finalmente el 2020 no fuera tan malo para este mercado como se aventuraba en los meses de abril y mayo, con un descenso en las ventas en todo el año que rondó el 12%.

De izquierda a derecha: Javier Llorente, director de Ability Maquinaria y Medio Ambiente, Unai López, delegado en la zona Norte de Arden Equipment, Fernando Sanz, responsable comercial de ITT Bobcat Of, y Luis Fueyo, director de Smopyc.

Y ahora que parece que se ve luz al final del 'túnel COVID-19', el problema es otro. El desequilibrio originado por la pandemia entre la oferta y la demanda de materias primas y los problemas logísticos que se han venido apreciando en estos últimos meses a nivel mundial por diferentes causas, han provocado un imparable ascenso de los precios y un alargamiento progresivo en los plazos de entrega. Se dan casos, como afirmaba Javier Llorente, que los fabricantes han subido a sus distribuidores hasta dos veces los precios de sus productos en apenas unos meses.

A la espera de que esta sitiación se normalice, las empresas del sector también deberían ver las oportunidades que esta subida del precio de las materias primas puede suponer para algunas actividades, como es la del reciclaje del metal. Ante la falta de materia prima habrá que apostar por la reutilización del material. Y ante el alargamiento en los plazos de entrega, las empresas también deberían extender un poco más el empleo de sus equipos usados, mejorando el mantemiento que hace de ellos, así como recurrir al alquiler y hacer los pedidos a su proveedor con mayor margen de tiempo y no tan pegados a la ejecución de la obra. En el caso de Arden Equipment, como señalaba Unai López, a pesar de tener sus dos fábricas a plena producción, están trabajando ahora en unos plazos medios de entrega de entre 15 y 16 semanas.

Pablo Budía, presidente de Aeded.

Según afirmaba Fernando Sanz, de ITT Bobcat Of, las principales tendencias en el mercado de la maquinaria vienen de dos vías: por un lado las más tecnológicas, centradas en la conectividad y en la digitalización, para poder, entre otras cosas, hacer mantenimientos en remoto o reconocer automáticamente los implementos; y por el otro, las derivadas de las reducciones de emisiones, tanto sonoras como de gases contaminantes, sobre todo en un sector como la demolición y el reciclaje que muchas veces requiere trabajar en interiores, en áreas urbanas y en zonas protegidas medioambientalmente.

En cuanto a los implementos, el mercado avanza hacia una cada vez mayor gama de modelos en todas las líneas de producto, tanto de los más grandes para ganar en producción, como de los más pequeños para poder realizar trabajos en áreas muy confinadas, como por ejemplo en la rehabilitación de edificios. También están surgiendo en el mercado nuevos implementos para abarcar más aplicaciones, de tal forma que las máquinas portadoras se consolidan como auténticos equipos multifunción capaces de hacer una demolición más selectiva y una clasificación in situ en la obra de los residuos, con una precisión quirúrgica.

Además, el de los implementos es de igual forma un mercado fuertemente impactado por la conectividad, para permitir a sus usuarios gestionar de la mejor forma posible el uso y mantenimiento de los equipos.

¿El problema de tanta conectividad? Como se señalaba en el webinar, que es imposible, por la estructura que tienen hoy en día la mayoría de las empresas, gestionar de forma adecuada tanta información. Se requeriría un departamento propio para poder aprovechar tantos datos, algo impensable para este tipo de compañías, muchas de ellas pymes. Por eso es muy útil la labor que hacen ya algunos distribuidores de gestionar ellos mismos esta información para el mantenimiento, avisando al cliente cuando haya que hacer cualquier intervención.

Además, sería muy beneficioso para los usuarios de estos equipos que se unificaran todas las plataformas digitales que hay disponibles en el mercado y que no se perpetúe la situación que se está dando actualmente de que cada fabricante tenga su propia herramienta de gestión.

Respecto al principal problema al que se enfrenta hoy el sector, los tres ponentes coincidieron al señalar al cumplimiento de las normativas. Como se afirmaba en el webinar, nuestro país ya dispone de una legislación importante en materia medioambiental y, más en concreto, en la gestión de residuos. Pero ahora lo que hace falta es que la Administración sea exigente a la hora de velar por su cumplimiento y acabar así con el intrusismo que se sigue dando en esta actividad. Además, desde el sector se pide unificar todas las normativas para que no se sigan dando tantas diferencias administrativas entre las comunidades autónomas. Afortunadamente y como señalaban los tres intervinientes, la labor que viene realizando Aeded desde hace años, ha conseguido paliar algo esta problemática, avanzar en la senda de la profesionalización y mejorar los ratios de seguridad en las obras. “No concibo este sector sin la labor que viene haciendo Aeded”, resumía Unai López.

En una sociedad que tiende claramente hacia la Economía Circular las actividades de demolición, descontaminación, corte y perforación deberían tener un papel muy protagonista. Y eso es lo que esperan que se confirme desde el sector, que cada vez se apueste más por una demolición selectiva, por una mejor clasificación de los residuos y por una actividad más profesional y respetuosa con el medio ambiente. Trabajos donde no se emitan gases contaminantes ni ruidos, donde los métodos que aporten la mayor seguridad sean los elegidos, donde la I+D se imponga a otras fórmulas obsoletas… Y para ello, como concluían en el webinar, será fundamental que la propia Administración sea la que impulse todas estas nuevas tecnologías, favoreciéndolas en todos sus pliegos y licitaciones.