La Junta de Andalucía califica la producción intensiva almeriense de 'respetuosa' con el entorno
30 de septiembre de 2009
La secretaria general del Medio Rural y la Producción Ecológica de la Junta de Andalucía, Mabel Salinas, ha defendido las prácticas medioambientales de la agricultura almeriense, en el marco de la jornada 'Requisitos de calidad en la horticultura'. Durante su intervención, Salinas afirmó que el consumidor demanda calidad y una agricultura sostenible y respetuosa con el medio ambiente. “Eso es lo que hacemos desde hace tiempo en Almería”, destacó la secretaria general. Además, Salinas hizo referencia a la “imparable” evolución de la agricultura de invernadero hacia un modelo “más sostenible y caracterizado por la introducción de nuevos métodos de lucha contra plagas”. “Cuando se habla de adecuarnos a los nuevos retos de la Política Agraria Común (PAC) -continuó-, en Almería nos pusimos un reto que estamos cumpliendo con creces: la producción integrada”. A modo de comparación, la secretaria general recordó que hace seis años, en la provincia almeriense había81.000 hectáreas; mientras que en 2008 se pasó a 330.000 de producción integrada. Por último, Salinas desaprobó la reciente eliminación de 26 normas de calidad europeas para frutas y hortalizas, aunque destacó la aplicación del Decreto de Tipificación: “Lo vamos a llevar a su máximo extremo, porque es lo que nos permitirá competir en un mercado cada vez más liberalizado por la UE y globalizado”. Así, la representante de la Consejería de Agricultura aseguró que la agricultura intensiva andaluza “no tiene nada que temer si la UE otorga un carácter más medioambiental a sus futuras ayudas agrarias”. En opinión de la portavoz de Agricultura, la comunidad andaluza es una de las más protegidas y respetuosas con la naturaleza. Para Salinas, la agricultura almeriense introducirá “a gran escala“ métodos de producción ecológica.“Sólo así se puede conseguir una agricultura viable, capaz de sostenerse por el mercado y no por las ayudas públicas”, reconoció.