MANN+HUMMEL aprovecha su experiencia en la producción y suministro de medios filtrantes para mascarillas
MANN+HUMMEL ha implementado actividades globales para ayudar a respaldar el control de la contaminación relativo a la propagación del coronavirus. Desde principios de 2018, se ha involucrado en el sector de la filtración de aire y agua, con la adquisición de una serie de compañías que le permite contar con una cartera de productos de filtración HEPA (Aire Particulado de Alta Eficiencia) de última generación, laboratorios especializados en tests de filtración, así como especialistas con amplia experiencia en filtración de quirófanos.
MANN+HUMMEL es capaz de colaborar en la coyuntura actual, al suministrar filtros HEPA necesarios en la instalación de salas de aislamiento de emergencia. “MANN+HUMMEL ha demostrado en repetidas ocasiones su competencia para transferir con éxito tecnología y conocimientos a nuevas aplicaciones. En estos momentos usamos nuestra experiencia en filtración de automoción para construir e impulsar la producción y suministro de medios filtrantes para mascarillas. Tenemos varios grupos de trabajo en diferentes países de todo el mundo trabajando en esta importante iniciativa y estamos muy orgullosos de sus esfuerzos", afirma el presidente y director ejecutivo del Grupo MANN+HUMMEL, Kurk Wilks.
Además de la fabricación de estos medios filtrantes en colaboración con fabricantes textiles, MANN+HUMMEL ha implementado la fabricación a gran escala de mascarillas (FPP1) en su nuevo Centro Operativo de Kunshan (China) y está preparando la instalación de otra línea de producción para mascarillas de grado médico (FFP2 / N95).
MICRODYN-NADIR, el especialista en membranas y módulos que pertenece al Grupo MANN+HUMMEL desde 2015, también está contribuyendo significativamente a una mejora de la situación actual. La producción en todas las plantas continúa, ya que la tecnología utilizada juega un papel vital en varias funciones críticas, incluida la producción de medicamentos o vacunas.
Además, las membranas tienen un papel imprescindible, ya que hacen que las aguas residuales sean aptas para la reutilización y permiten la separación exitosa de bacterias, virus, residuos farmacéuticos u otros micro contaminantes.