La gran mayoría de declarantes de ingresos agrarios no son agricultores profesionales
La profesionalización de la agricultura española sigue su curso, pero lo hace a ritmo lento. Tras analizar la serie temporal de datos de los rendimientos agrarios netos declarados a la Agencia Tributaria, la Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos observa que el número de agricultores profesionales —aquellos cuyos rendimientos agrarios superan el 50% de los rendimientos totales declarados— ha pasado de 194.015 en 2014 a 195.714 en 2017, que implica un aumento de 1,5 puntos en su peso respecto al total declarantes.
Sin embargo, estos trabajadores representan todavía apenas el 18,8% del total, lo que, según la organización, indica un limitado nivel de especialización y de profesionalización en el ámbito de la agricultura. Asimismo, en términos de renta, a pesar de su tendencia positiva, los profesionales agrarios todavía se sitúan un 37% por debajo de la renta media del conjunto de la economía, lo que revela la importancia de las ayudas de la PAC en el sostenimiento de las rentas dentro del sector.
A nivel regional quedan patentes notables diferencias en el grado de profesionalización y de renta. En el periodo 2014-2017, el número de declarantes con rendimientos agrarios por encima del 50% aumentó en Andalucía en un 24% y en la Regón de Murcia en un 11,4%, mientras que en Asturias y en Cantabria descendió un 19,4% y un 18,5%, respectivamente.
El mayor número de agricultores profesionales se mantiene en Castilla y León (31%), Cantabria (29,5%) y La Rioja (25,6%). En términos de renta, se dieron importantes incrementos en la Comunidad de Madrid, Canarias y Andalucía, mientras que en Cantabria, Castilla y León y Aragón se dieron notables caídas. Asimismo, es preciso destacar que, en el caso de Galicia, Asturias y Cantabria, donde se declaran unos rendimientos por debajo de los 8.000 € y por ende la actividad agraria es menos rentable, hay un descenso muy notable en el número de trabajadores por cuenta propia en los últimos años, con caídas de 28,9%, 28,4% y 20,4% entre 2009 y 2018.