La morosidad de agricultores y ganaderos continúa reduciéndose
La morosidad de agricultores y ganaderos volvió a reducirse el año pasado. La tasa de crédito dudoso se situaba en el 6,2% al finalizar 2018, frente al 7,5% del año anterior y por debajo de la del conjunto de las actividades productivas, que era del 6,8%.
Son datos ofrecidos por Unión de Uniones que cita como fuente el informe de financiación en el sector agroalimentario hecho público por la Administración central. La organización destaca el esfuerzo de agricultores y ganaderos para adaptarse a las nuevas exigencias de todo tipo pese a la desfavorable situación climática y de mercado que ha afectado a importantes sectores.
Este nuevo descenso en la morosidad no se trata de una situación coyuntural, a juicio de Unión de Uniones, que al mismo tiempo advierte del aumento del endeudamiento del sector agrario, que al finalizar 2018 era de 22.729 millones de euros, frente a los 19.255 millones de euros que era el saldo vivo de los créditos vigentes en el último trimestre de 2017.
La organización pone en valor las continuas inversiones que los agricultores y ganaderos están realizando para la adecuación a nuevas exigencias normativas de carácter ambiental, de seguridad alimentaria, laborales o de bienestar animal, debiendo acudir a financiación externa ante un acceso ayudas públicas para tales fines cuya tramitación y concesión en general no es fácil ni ágil.