Los jóvenes agricultores son "los primeros militantes en favor de la transición ecológica"

La agricultura y el sector forestal pueden contribuir eficazmente a la mitigación del cambio climático, por su capacidad de almacenar carbono y constituirse como sumideros, tanto en los suelos como en forma de biomasa. La afirmación es del ministro Luis Planas, durante la jornada 'El sector agrario frente al reto medioambiental y climático', organizada el 6 de marzo en Madrid de manera conjunta por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco).

Según un comunicado oficial, el principal objetivo de esta cita fue transmitir a la sociedad la coherencia entre las políticas agrarias y de medio ambiente y clima, para alcanzar una actividad agraria y forestal sostenible en sus vertientes ambiental, económica y social. Planas aseguró que España cuenta con un sector agroalimentario dinámico y competitivo, que debe superar los nuevos desafíos a los que se enfrenta el conjunto de la sociedad, como el cambio climático, la preservación del medio ambiente y la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030.

El ministro destacó que una agricultura sostenible es esencial para que los alimentos españoles sean mejor valorados por los consumidores dentro y fuera de nuestras fronteras. Considera que afrontar este reto ambiental puede suponer una oportunidad catalizadora de una actividad económica en el medio rural, para mejorar la calidad de vida de sus habitantes, especialmente en los territorios afectados por procesos de despoblación.

A juicio de Planas, los lazos entre los agricultores y la defensa de la biodiversidad y la lucha contra el cambio climático han de ser firmes, en particular los jóvenes agricultores, que son "los primeros militantes en favor de la transición ecológica".

La futura PAC 2021-2027 contempla nueve grandes objetivos específicos, de los que tres de ellos son de carácter medioambiental: contribuir a la atenuación del cambio climático y a la adaptación a sus efectos, promover el desarrollo sostenible y la gestión eficiente de los recursos naturales, y promover la protección de la biodiversidad.

Planas recalcó que España defiende que la PAC post 2020 conserve su presupuesto actual a UE-27, para que agricultores, ganaderos y silvicultores puedan afrontar estos nuevos retos medioambientales sin menoscabo de la rentabilidad de sus explotaciones. También considera necesario que se incremente la cofinanciación a las inversiones realizadas por jóvenes agricultores, dentro del segundo pilar de la PAC, que tengan fines climáticos y ambientales, las inversiones en innovación, la cooperación Leader, y la formación y el intercambio de conocimiento.

Según su criterio, la nueva arquitectura ambiental de la PAC y las intervenciones del futuro Plan Estratégico se convierten en una parte importante de los mecanismos para impulsar el cambio de modelo del sector agrario, de tal forma que contribuya al cumplimiento de los compromisos ambientales sin poner en riesgo la competitividad y rentabilidad de las explotaciones.

El ministro considera fundamental contar con la experiencia y conocimiento de agricultores, ganaderos y silvicultores, ya que son parte activa y protagonistas de las medidas que se tomen en materia de sostenibilidad. Reclamó unas explotaciones agrarias más rentables y eficientes, y respetuosas con el medio ambiente y el clima.