La finalidad es probar que actualmente disponen de los avances tecnológicos suficientes para la creación de una instalación de este tipo

La Etsia desarrolla un proyecto de autosuficiencia energética con Climatización Invisible de Uponor

Redacción Interempresas27/08/2008

27 de agosto de 2008

La idea, implementada por la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos de Madrid (Etsia), pretende demostrar la posibilidad de lograr la autosostenibilidad en la calefacción y climatización del conjunto de las instalaciones del Grupo de Agroenergética de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM). La multinacional finlandesa Uponor, por su parte, participa con su sistema de Climatización Invisible en una de las partes esenciales del proyecto, el secadero.

En la iniciativa se contempla la cadena energética completa, desde la producción del biocombustible a la utilización final de la energía, que se empleará en el sistema de calefacción de las instalaciones, un conjunto de laboratorios y despachos de una superficie aproximada de 200 metros cuadrados. Como materia prima para la producción energética se utiliza la biomasa vegetal procedente en su mayor parte de las podas de viñedos, frutales y árboles ornamentales que se encuentran en los campos de prácticas de la UPM.

El calor solar resulta insuficiente, sobre todo por la noche, para conseguir un rápido y óptimo secado de la biomasa.

El proceso paso a paso

El recorrido se inicia con el traslado de la biomasa leñosa astillada y su posterior almacenado. La biomasa llega al recinto con un grado de humedad que ronda el 40 - 60 por ciento. Entonces, se deposita en el secadero, la zona donde está instalada la solución de Climatización Invisible de Uponor. En el secadero, con unas dimensiones aproximadas de 30 metros cuadrados y una capacidad para 3 metros cúbicos de biomasa, se aprovecha tanto el calor generado por el efecto invernadero (ya que está revestido por una cubierta de polietileno), como el que produce la solución de Climatización Invisible de Uponor. Es en este momento cuando el sistema juega un papel determinante. El calor solar resulta insuficiente, sobre todo por la noche, para conseguir un rápido y óptimo secado de la biomasa por lo que se hace imprescindible la participación de la Climatización Invisible.

Jesús Fernández González, Catedrático del Grupo de Agroenergética de la Etsia y principal responsable de las instalaciones, comenta que "al principio teníamos ciertas dudas sobre el grado de transferencia del calor que lograríamos con la solución de Uponor, pero ahora ya sabemos que funciona perfectamente". Además, "una de nuestras principales preocupaciones era saber si las tuberías iban a aguantar las altas temperaturas que nosotros necesitamos alcanzar, cercanas a los 80 ºC. Estas son muy superiores a las que el sistema debe enfrentarse cuando se instala en una vivienda convencional. Pero no nos ha defraudado". Así mismo, la optimización y ahorro energético fueron dos de los pilares fundamentales para la elección de la solución de Climatización Invisible Uponor para el proyecto.

Una vez alcanzado el nivel de secado necesario se lleva a cabo un nuevo triturado de la materia y su transformación en pelets (cilindros de biomasa prensada en unos 6 mm de diámetro y unos 2 cm de longitud). Los pelets sirven para alimentar a las tres calderas que producen agua caliente para la calefacción de los laboratorios y despachos del Grupo de Agroenergética de la Etsia. La energía necesaria para el secadero se obtiene con otra caldera que utiliza biomasa en forma de leña o briquetas.

El recorrido se inicia con el traslado de la biomasa leñosa astillada y su posterior almacenado.

Objetivo del proyecto

La finalidad última del proyecto es probar que actualmente disponen de los avances tecnológicos suficientes para la creación de una instalación agraria energéticamente autosuficiente. El escaso tiempo trascurrido desde la implementación de todos los sistemas que componen los campos de prácticas no han permitido obtener aún resultados definitivos. De todos modos, todo parece indicar que los planteamientos realizados sobre el papel por Jesús Fernández García y su equipo eran correctos.

El respeto al medio ambiente es uno de los fundamentos sobre los que Uponor ha basado sus actividades desde su origen. La compañía apuesta por el desarrollo e innovación de soluciones que supongan una reducción de las emisiones contaminantes y ahorro energético. Una prueba de esta conciencia ecológica, es la implantación de un Sistema de Gestión de Calidad Medioambiental en su fábrica, almacén y oficinas centrales de España y Portugal. Además, Uponor fue una de las primeras empresas del sector en obtener la certificación medioambiental UNE-EN-ISO 14001.