Una tesis analiza las noticias sobre siniestralidad en el sector agrario de 2004 a 2013
El ingeniero técnico agrícola Pedro Arnal Atarés ha analizado en su tesis doctoral, defendida en la Universidad Pública de Navarra (UPNA) bajo el título 'Análisis de la información sobre accidentes en el sector agrario recogida en los medios de comunicación en el decenio 2004-2013', un total de 6.624 piezas informativas que relatan 2.551 accidentes desarrollados con las labores agrícolas, la mayoría de ellos, producidos por vuelcos de tractor. La investigación ha sido dirigida por la profesora del Departamento de Ingeniería de la UPNA Carmen Jarén Ceballos.
El tractor, principal protagonista
Según se desprende de la tesis, los accidentes ocurren mayoritariamente en los meses de primavera y verano (mayo, junio y julio), que es la época en la que más trabajos hay en la agricultura. En cuanto al día de la semana, de lunes a jueves, el número de accidentes ronda los 400, el viernes y el sábado se producen 350 y, el domingo, 200.
En la mayoría de los accidentes está presente el tractor (69%), ya que es el elemento propulsor de la casi totalidad de las máquinas agrícolas. En un porcentaje elevado de accidentes, están involucrados otros vehículos y suceden en caminos o carreteras. Los accidentes más frecuentes son los de vuelco del tractor, con un 30% del total, seguidos de los accidentes de tráfico, con el 24%. A continuación, siguen la caída de tractores por terraplenes y el aplastamiento por el vehículo.
En cuanto a la mortalidad de los accidentados, el vuelco del tractor ocasiona el mayor porcentaje de muertos, seguido por los accidentes de tráfico. Como tercera causa, aparece la caída del tractor a distinto nivel (ribazo, terraplén, etc.), ya que, como consecuencia de la caída, suele producirse un vuelco que, en muchos casos es mortal. En un porcentaje muy elevado de los accidentes recogidos, solo interviene un vehículo, habitualmente el tractor, y únicamente está implicada una persona, generalmente, el tractorista.
En los desplazamientos para llegar y volver del lugar de trabajo, in itinere', se producen casi el 60% de los accidentes. En este punto, el autor de la tesis remarca la importancia de seguir los reglamentos de seguridad vial, así como la necesidad de que tractores y remolques pasen las inspecciones pertinentes. “Estos accidentes se producen en su mayoría en las vías interurbanas, carreteras, caminos o pistas forestales, puesto que los tractores prácticamente no circulan por las calles del interior de las poblaciones”, aclara.
Tipos de accidentes y estado de los vehículos
El autor utiliza en su tesis una 'tasa de accidentes' calculada a partir del censo de tractores agrícolas publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. En ella, se observa que, a lo largo de los años, el ratio de accidentes con esta maquinaria está por debajo de la general de vehículos de carretera. No obstante, se observa que, mientras la tasa general desciende, la de accidentes agrícolas en tráfico se mantiene o aumenta ligeramente.
En cuanto al estado de los vehículos accidentados, el autor de la tesis indica que no se aprecian defectos en la mayoría de los casos, aunque el de las luces traseras deficientes es el más común. En cuanto a las infracciones cometidas, las más habituales son la conducción distraída, girar incorrectamente, no respetar las prioridades e incumplir la señal de stop. “A la vista de los datos, no es cierto del todo que los accidentes se produzcan con los tractores más viejos”. Y añade: comparando la antigüedad de los vehículos que intervienen con su implicación en los accidentes se puede observar que los tractores más jóvenes con menos de 5 años (el 15%) intervienen en el 27% de los accidentes, mientras que los más antiguos, con más de 16 años, (el 55%) solo lo hacen en el 24%”.
Profesor, técnico, empresario agrícola... y ahora también doctor
Pedro Arnal Atarés obtuvo el título de perito agrícola en la Escuela de Peritos Agrícolas de Navarra en mayo de 1968. Un año después, comenzó su vida laboral como profesor de Maquinaria Agrícola en la Escuela de Capacitación Agraria de Huesca. En 1983 se integró en la plantilla del entonces Instituto Técnico y de Gestión del Cereal como técnico especialista en mecanización y laboreo, puesto en el que permaneció hasta junio de 1998.
En enero de 1994, fue contratado como profesor asociado de la UPNA adscrito al Área de Ingeniería Agroforestal, para impartir clases de tractores y de maquinaria agrícola hasta su jubilación. También ha sido empresario agrícola, al dirigir en Huesca la explotación agrícola familiar. En la actualidad, es profesor honorario de la UPNA. Autor de numerosos artículos de divulgación así como de varias publicaciones, Pedro Arnal ha participado en muchas jornadas, congresos y cursos, dedicándose últimamente a la difusión de la agricultura de conservación y a la siniestralidad en el sector agrario, tema de su tesis doctoral.