Caffini lanza un pulverizador de recuperación para viñedo

Los experimentos llevados a cabo con el departamento TeSAF han puesto de manifiesto que, a pesar que los ensayos se realizarán con los pulverizadores más avanzados (con chorro dirigido y flujo tangencial), la vegetación absorbe solamente el sesenta por ciento del producto irrigado. En este sentido, Caffini ha introducido una mejora más, cambiando de tecnología y enfocando sus esfuerzos en un pulverizador de recuperación, bautizado con el nombre de Drift Stopper.

Los pulverizadores de recuperación no son una novedad. Se han fabricado y comercializado desde hace años. Sin embargo, se adaptan con dificultad a viñedos que no se hayan diseñado teniéndolos en cuenta. Ello ha supuesto que la cifra de ventas de este tipo de pulverizadores haya sido tradicionalmente baja y, en consecuencia, su manufactura ha sido siempre próxima a lo artesanal. Para superar esta limitación, Caffini y la Universidad de Padua han partido de un prototipo basado en una máquina comercial. La máquina realizada se caracteriza por un sistema de limitación de la nube de agua en el lado posterior (a la salida) y hacia abajo, realizado por medio de una lámina de aire. El sistema empleado está pendiente de patente. Tras dos años de prueba, el prototipo ha conducido al diseño de un equipo comercial.

Este pulverizador de recuperación está equipado con paneles modulares, disponibles en distintas alturas, montados en una estructura de polietileno resistente tanto a los agentes químicos como a los baches. En el interior de los paneles se encuentra un sistema de interceptación de las gotas, fabricado con álabes de aluminio con un perfil especial que recoge las gotas que se han perdido al rociar los cultivos durante su tratamiento. Estas gotas se recuperan en pequeños sumideros y se envían al depósito principal. Con el fin de optimizar el uso de productos químicos y evitar la deriva causada por el movimiento de avance de la máquina y por el viento y otros agentes externos, Caffini ha desarrollado un sistema de flujo que funciona como cortina de aire.

El aire de tratamiento se mezcla con los líquidos a pulverizar en boquillas para garantizar una óptima penetración en los cultivos. Un sistema de cortinas innovador, que actúa como un álabe de aire evita el escape de la mezcla química de los paneles, tanto en sentido horizontal como vertical.