Las mujeres del medio rural se preparan para el 8 de marzo
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) y la Confederación de Mujeres del Medio Rural (CERES) secundarán la huelga laboral, de cuidados, consumo y educación del próximo 8 de marzo, convocada con motivo del Día Internacional de la Mujer.
Ambas organizaciones cerrarán sus oficinas centrales en Madrid y hacen un llamamiento a la participación de hombres y mujeres del medio rural en las movilizaciones y concentraciones convocadas. "Animamos a todas las agricultoras y ganaderas a demostrar que si ellas paran, se para el mundo rural", aseguró Inmaculada Idañez, responsable del Área de la Mujer de COAG y Presidenta de CERES.
El medio rural es un espacio donde se acentúan los problemas de desigualdad entre hombres y mujeres, donde vivir afecta especialmente a las mujeres porque el déficit de servicios es mayor. Se han producido "fuertes recortes" que se "han incrementado" conforme han pasado los años. Apenas hay escuelas de cero a tres años, se han cerrado consultorios médicos, han dejado de prestarse servicios especiales o se han eliminado líneas de transporte.
En un escenario donde “la estructura es patriarcal, suplir esos servicios es tarea de las mujeres”, lamentó Idañez. El envejecimiento de la población rural incrementa las situaciones de convivencia con personas en situación de dependencia en el medio rural, lo que repercute en la carga de trabajo de las personas cuidadoras, por norma general mujeres, disminuyendo sus posibilidades de participación laboral, política o social.
En ese sentido, desde COAG y CERES se reclama que se erradique la división sexual del trabajo, que condena a las mujeres a empleos precarios, peor pagados, no remunerados, ilegales e invisibles y que las obliga a ser cuidadoras como algo esencial de su sexo. Asimismo, con este paro se quiere reivindicar un cambio de modelo donde “nuestros derechos no sean cuestionados y se visibilice la imprescindible labor de agricultoras y ganaderas para el correcto funcionamiento del tejido productivo agroalimentario”, subraya Inmaculada Idáñez, responsable del Área del Mujer de COAG y presidenta de CERES, a lo que añadió: “Frente a un Estado que nos ignora, denunciamos la violencia institucional que venimos sufriendo. No existen leyes efectivas que logren erradicar la violencia estructural y que supriman la jerarquía que coloca a los hombres sobre las mujeres”.