Kramp exhibe su capacidad en Francia

Kramp organizó una jornada abierta con clientes y proveedores en Poitiers (Francia), donde dispone de uno de los almacenes de recambios más importantes del Grupo.

El 'Open Kramp' es un evento con el que la multinacional buscó estrechar vínculos con clientes y proveedores. Se celebró el 18 de enero en sus instalaciones de Poitiers (Francia), donde disfruta de uno de sus almacenes más importantes, de los diez con que cuenta en toda Europa.

Tras la recepción de los invitados, procedentes de diferentes países en los que está presente Kramp, se realizó un recorrido por el almacén para conocer los departamentos que lo componen y algunas cifras relevantes.

El primer dato ofrecido fue que el índice de satisfacción del cliente es del 4,02 (sobre un máximo de 5 puntos). En el caso del almacén que el Grupo tiene en Algete (Madrid) es de 4,01. El resultado de los índices de satisfacción los utiliza para evaluar los procesos internos y mejorar en áreas críticas.

Las cajas con cada pedido completan un recorrido de tres alturas a través de una cinta de varios cientos de metros.

De lunes a viernes, en horario de 8 a 18 horas, reciben unas 1.500 llamadas, de las que tan solo el 5% no se atiende en primera instancia. Kramp utiliza varios canales de respuesta, telefónico o digitales.

Cada jornada arranca a las 6:00 y hasta las 14:00 horas se realiza la recepción de materiales y su correspondiente almacenamiento mediante un sistema automatizado en el que trabajan 16 personas. En Poitiers trabajan con 500 de los más de 2.000 proveedores que tiene el Grupo Kramp. De 14:00 a 22:30 horas se preparan los pedidos y las expediciones.

Diariamente se cumplimentan una media de 3.500 pedidos con hasta 20.000 líneas. La media es de 2,5 bultos/pedido, con piezas o recambios de tamaños y pesos desiguales (puede ir, por ejemplo, desde una arandela a un cabezal de cosechadora). En cualquier caso, el 95% se entregan al día siguiente antes de las 13:00 horas.

Las instalaciones de Poitiers continúan en proceso de expansión. El año pasado se inauguró el cuarto pabellón que, como los anteriores, ocupa 6.500 m², lo que hace un total de 26.000 m², con un valor de stock acumulado de 24 millones de euros. En marcha están las obras de próximos pabellones que seguirán ampliando la capacidad hasta 42.000 m².

Tampoco deja de crecer el volumen de facturación. Según las cifras avanzadas por sus responsables, el almacén de Poitiers, con una cartera de 8.000 clientes, alcanzó el año pasado los 84 millones de euros, diez más que en 2016.

Área de mantenimiento

Una zona que cobra importancia es la dedicada al mantenimiento, donde se realizan labores de montaje —valvulería, cilindros, etc.— con su oportuna comprobación antes del envío al cliente. Técnicos de Kramp dejaron claro que los productos aquí montados cuentan con la misma garantía que la ofrecida por el fabricante. En este departamento son capaces de producir determinadas piezas ajustadas a las necesidades del cliente.

Uno de los miembros del grupo español invitado por Kramp fue Lucas Heredia, gerente y jefe de Posventa de Hermanos Heredia y Mulero. "El trabajo en el almacén lo tienen muy bien estructurado. Sus proveedores son siempre primeras marcas y las suyas propias —Kramp y GoParts— son fabricantes de gran nivel", afirmó.

Esta empresa de Lorca (Murcia) es también concesionario de New Holland, por lo que observó con especial detalle la concesión Gonnin Duris. "Se le ve un incremento de facturación importante y perspectivas de crecimiento, debido a la posibilidad de venta a muchos talleres de la zona. En España se respeta mucho más los concesionarios y talleres colaboradores", afirmó.

El grupo español, con clientes y miembros del equipo de Kramp Iberia, a las afueras del almacén de Poitiers.

Otra visión del viaje es la ofrecida por Patricia Pérez, directora comercial de Talleres José Luis Maquinaria Agrícola, de Vargas (Cantabria), que se mostró muy agradecida con la atención parte de todo el personal de Kramp España y Kramp Francia, con mención especial al director ejecutivo, Eddie Perdok. Además, destacó que las instalaciones de Poitiers "hablan por sí solas, dando una imagen de organización y limpieza".

La empresaria cántabra subrayó que Kramp "es un grupo que está creciendo exponencialmente, mejorando su gestión, lo que nos deja ver que su objetivo principal es la satisfacción de sus clientes, ofreciéndonos cada día nuevas posibilidades de mercado con la ampliación de sus gamas de producto". Para su empresa, es el principal proveedor en tienda (blíster, ropa, piezas de desgaste, de ganadería, etc.) "con plazo de entrega de 24/48 horas, lo que nos permite no tener un stock innecesario", explicó.

"Toda la gestión de devoluciones, garantías, etc., se hace de manera fácil y ágil, evitando también un gasto de tiempo, lo que supone un ahorro. Esta organización repercute positivamente en nuestros clientes y nos reporta un gran servicio", concluyó Pérez.

Primeramente, Auriau, distribuidor de las marcas de tractores Fendt y Valtra y de otras muchas de implementos, con una plantilla de 20 empleados, incluidos 12 mecánicos, de ellos cinco itinerantes. Su facturación en posventa llega a los 4 millones de euros y cuenta con instalaciones en La Grimaudière, Iteuil, Surgéres, La Forét Sur Sévre y Saint-Pardoux. La media anual de venta de tractores nuevos es 25 unidades, que trabajan unas 300 horas al año.

La segunda concesión visitada es de un tamaño mayor. Gonnin Duris es distribuidor de CNH Industrial, con 33 bases repartidas por toda Francia, entre ellas la principal —que tuvimos ocasión de conocer por dentro— perteneciente a la red de New Holland.

La facturación global se eleva a los 160 millones de euros anuales y al servicio de taller y tiendas físicas añade otros negocios, como la venta de recambios por internet o una plataforma para distribución de aceite industrial. Cuenta con 42 comerciales y un equipo de apoyo que controla y organiza su labor, lo que supone un ahorro estimado de 500.000 kilómetros de transporte.

Las instalaciones situadas en La Ferrière-Airoux incluyen una zona de exposición de maquinaria, de una amplia tienda con mostrador de recambios y un taller de 4.000 m², con dos áreas de reparación diferenciadas según la urgencia y el momento de la campaña.