Castilla y León incrementa la superficie asegurada en herbáceos y viñedo un 72%
Castilla y León ha logrado impulsar la superficie de cultivo asegurada con las medidas puestas en marcha por la Consejería de Agricultura y Ganadería para hacer frente a las posibles inclemencias meteorológicas, como las sufridas en la pasada campaña. Según fuentes del ejecutivo autonómico, el objetivo es establecer instrumentos esenciales que afiancen la competitividad de las explotaciones agrarias, permitiéndoles gestionar los riesgos que puedan poner en peligro su rentabilidad y proporcionándoles un escenario de certidumbre en el que poder desarrollar su actividad.
Así, en 2017 los agricultores y ganaderos de la Comunidad aseguraron 1.515.196 hectáreas de herbáceos frente a las 879.839 registradas en 2016, lo que supone un incremento del 72,2%. En viñedo el incremento fue del 72,4%, pasando de 9.966 hectáreas aseguradas en 2016 a 17.182 en 2017.
La Junta ha triplicado la dotación prevista al inicio de legislatura hasta superar los 7,8 millones de euros, como quedó de manifiesto en el convenio firmado el pasado mes de octubre con Agroseguro. Esto convierte a Castilla y León en la segunda comunidad autónoma que más presupuesto destina a las ayudas de los seguros agrarios. Todas estas aportaciones se complementarán con las ayudas que el Estado concede a través de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa), por lo que la subvención del coste de la póliza llegará hasta el 50%.
Los agricultores de la Comunidad han suscrito 23.085 pólizas de seguro de herbáceos en 2017 frente a las 12.515 de 2016 (un 84% más) y 1.300 de viñedo frente a las 795 de 2016 (un 63,5% más). Percibirán las ayudas de forma inmediata en la propia póliza eliminando los trámites administrativos antes necesarios para solicitar esta subvención.
Seguros agrícolas
Para los seguros agrícolas se mantiene el porcentaje de apoyo del 10 % de la prima comercial base neta de las pólizas de los seguros que suscriban los agricultores para explotaciones de cultivos herbáceos extensivos, así como para semilla (alfalfa), cultivos forrajeros (alfalfa, veza y esparceta), hortalizas al aire libre de ciclo otoño-invierno (patata y ajo) y de ciclo primavera-verano (cebolla, pimiento y judía verde), cultivos frutícolas, cereza, uva de vinificación, remolacha y lúpulo.
Además, la Consejería de Agricultura y Ganadería gestionará directamente, para aquellos beneficiarios titulares de parcelas con siniestros ocasionados por el topillo campesino y declarados como indemnizables, el incremento de la ayuda de un 65 % sobre la póliza del cultivo correspondiente que hayan contratado los agricultores.
Recuperación de los seguros para producciones ganaderas
Respecto al resto de líneas de seguro, una de las novedades que se han introducido es la recuperación, por parte de la Consejería de Agricultura y Ganadería, de la subvención a la suscripción de seguros de producciones ganaderas.
Esta ayuda, cuyo último año de convocatoria fue 2011, va dirigida a los sectores de vacuno, ovino/caprino, porcino, equino, avícola y apícola con un 10 % de la prima comercial base neta. También se auxiliará el seguro de compensación por pérdida de pastos en sequía con un 25 % de la prima comercial base neta, gracias al cual quedan garantizados los valores de compensación por gastos en alimentación respecto del ganado bovino, ovino, caprino y equino cuando se constate una merma de la actividad de la vegetación pastable en determinadas circunstancias como, por ejemplo, en sequía.
Seguros de retirada de animales muertos
En los seguros de retirada de animales muertos también se mantiene el porcentaje de apoyo con un 30% para el ganado porcino y el cunícola, un 25% para el vacuno y el ovino/caprino, y un 15% para el equino y el aviar.
Todas estas aportaciones se complementarán con las ayudas que el Estado concede a través de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa), por lo que la subvención del coste de la póliza llegará hasta el 50%.