¿Qué hacer antes de pintar la maquinaria agrícola?

Actualmente, muchos de los tratamientos previos a la pintura se realizan por procesos químicos como fosfatados, ácidos, decapados u otros productos que necesitan depuradora y originan un elevado costo de gestión de residuos, cada vez más sancionado.

Talleres Alju es una empresa situada en Vizcaya que lleva 48 años aportando soluciones para este tipo de tratamientos. Soluciones como el chorreado manual, proyectando abrasivo utilizando aire comprimido como medio de impulsión, o con granalladoras automáticas, con proyección de granallas metálicas por medio de turbinas.

Además, los diferentes tipos de abrasivos del mercado y la evolución de la tecnología permiten a Alju “dar soluciones a cada vez más aplicaciones”. Su sistema posibilita, por ejemplo, sustituir el desengrase y fosfatado por el granallado, con un gran ahorro en gestión de residuos y depuración.

Con estas máquinas se consigue eliminar rebabas desprendibles, cascarillas, restos de soldadura, óxido, pintura y cualquier resto de suciedad que pueda originar un rechazo del producto final. Además, las piezas quedan brillantes, con el metal virgen, y con una rugosidad que permite “una excelente adherencia de la pintura”. Alju fabrica máquinas construidas con materiales antiabrasivos para aguantar muchas horas de funcionamiento, minimizando los desgastes. Son capaces de tratar cualquier pieza, sea cual sea su tamaño y configuración: desde piezas de gramos de peso hasta de varias toneladas, y en diferentes sistemas de granallado: en continuo, ciclo a ciclo o granel.

Anju apuesta por sustituir los tratamientos químicos e incorporar el proceso de granallado en la fabricación de la maquinaria agrícola, ya que, según explica, “se reducen los costes y se mejora la calidad”.