Consideran que la extensión del Reglamento de privacidad electrónico pondría en peligro la transformación digital de industrias clave
Los fabricantes de equipos agrícolas y de construcción reclaman que la ePrivacy no se extienda a las comunicaciones ‘máquina a máquina’
Los planes para extender el ámbito de aplicación del Reglamento de privacidad electrónico de la UE (e-privacy) a las comunicaciones ‘máquina a máquina’ (M2M) deben ser archivados. Así lo reclaman representantes de las industrias europeas de equipos agrícolas y de construcción, antes de una votación crucial sobre dicha propuesta en la Comisión de Justicia y Asuntos Interiores del Parlamento Europeo, que tendrá lugar el próximo jueves.
A su juicio, la extensión podría perjudicar seriamente la transformación digital en ambos sectores y poner en riesgo su competitividad internacional. Las comunicaciones M2M se extienden regularmente entre diferentes máquinas industriales que trabajan en una misma zona. Por ejemplo, en las principales obras de construcción o en los campos agrícolas.
De ahí que una M2M transparente se considere “la columna vertebral para la transformación digital exitosa de los sectores de la construcción y la agricultura”, en palabras de Ulrich Adam, secretario general de la Asociación Europea de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CEMA).
En un comunicado remitido conjuntamente por la citada asociación y su homóloga para el sector de construcción (CECE), las relaciones comerciales entre empresas afectadas por los intercambios de datos industriales M2M están reguladas por la libertad de contrato. La ampliación del ámbito de aplicación del Reglamento sobre privacidad electrónica significaría que el concepto de consentimiento personal también podría aplicarse a este tipo de comunicación.
“Tal paso sería altamente contraproducente y obstaculizaría la innovación futura, mediante una serie de consecuencias no deseadas, impactos pasados por alto, coherencias entre textos legales y posibles malentendidos”, señaló Riccardo Viaggi, secretario general de CECE. La aprobación “sería un duro golpe para la ambición de la UE de construir un mercado único digital apto para el propósito y abierto a los negocios”, advirtió.
La prórroga propuesta iría en contra del objetivo original, el Reglamento de privacidad electrónico, cuyo objetivo es proteger a los consumidores y sus datos personales. Ambos representantes recordaron que la prórroga también crearía incompatibilidades con el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR). “Necesitamos encontrar el justo equilibrio entre proteger la privacidad y permitir el procesamiento justo y seguro de los datos de las comunicaciones electrónicas. Sin embargo, ampliar el alcance del Reglamento sobre privacidad electrónica a las comunicaciones de M2M no es el camino correcto”, concluyeron.