La industria pide que Turquía revise el aumento de aranceles a tractores extracomunitarios
En nombre de sus empresas afiliadas afectadas, CEMA, AEM y JAMMA han reiterado en un comunicado su profunda preocupación por la Decisión No. 2017/9750 de la República de Turquía sobre los aranceles a los tractores importados en Turquía. La Decisión nº 2017/9750 prevé un nuevo arancel del 21% sobre todos los tractores importados de fuera de la UE. Estas medidas pueden privar a los agricultores turcos del acceso a maquinaria agrícola asequible y de vanguardia, según reivindican las tres asociaciones.
Al desalentar la inversión extranjera y el compromiso, el aumento de los aranceles de importación obstaculizará el flujo comercial, la competencia y la diversidad de productos en Turquía. En última instancia, la decisión afectará negativamente a la innovación y la competitividad de los fabricantes turcos de maquinaria agrícola.
Importante inversión en Turquía de las empresas afectadas
- Los fabricantes de maquinaria agrícola estadounidenses, europeos y japoneses afectados, que importan parte de su maquinaria agrícola de la UE y de otros lugares a Turquía, participan activamente en la introducción de nuevas tecnologías y equipos en el mercado turco para ayudar a Turquía a mantener su ventaja competitiva en la producción agrícola en un mercado mundial cada vez más competitivo.
- Estas empresas tienen un fuerte compromiso con Turquía y han invertido o planean invertir en Turquía, con el fin de poner a disposición de los agricultores turcos la más reciente tecnología de maquinaria agrícola.
- Las empresas afectadas ofrecen más de 5.000 puestos de trabajo en Turquía y, en los últimos 5 años, han invertido más de 225 millones de euros en el país.
La distorsión del mercado amenaza con destruir una situación comercial mutuamente beneficiosa
- Un terreno de juego equitativo es esencial para mantener el comercio mutuamente beneficioso de maquinaria agrícola y componentes de maquinaria agrícola entre Turquía, Estados Unidos, la UE y Japón.
- Para los tractores importados, la medida tendrá un efecto negativo inmediato sobre la producción y la importación. La medida también perjudicará a los distribuidores de tractores turcos que han invertido fuertemente en un mercado estable, y los agricultores turcos ahora se ven obligados a pagar precios más altos por la maquinaria agrícola.
- A su vez, la medida afectará negativamente a la creciente exportación de componentes de maquinaria agrícola producidos en Turquía. Las empresas afectadas han desempeñado un papel clave en ayudar a expandir el uso de componentes turcos en todo el mundo. Como parte de la creciente integración global de las cadenas de suministro y los procesos de producción, muchas empresas proporcionan componentes de proveedores de Turquía a fábricas de todo el mundo. El valor agregado de los componentes de origen turco en la producción de maquinaria agrícola internacional se sitúa en torno a los 500-700 millones de euros.
- Además, este tipo de decisión podría llevar a que se impusieran aranceles adicionales a la maquinaria turca exportada a otros mercados, lo que daría lugar a pérdidas de beneficios para las empresas turcas.
- El crecimiento en el sector agrícola turco sólo puede sostenerse a largo plazo si los productores turcos pueden acceder de manera justa a la maquinaria extranjera y los fabricantes turcos de maquinaria y los productores agrícolas pueden vender sus bienes y producir en el mercado global.