Europa cierra un 2016 pésimo

Lo mejor que ha podido pasarle al sector de la maquinaria agrícola europea es que se acabara 2016. Un mal año, sin tapujos, aunque haya habido mercados como el español que se hayan convertido en un pequeño oasis en un inmenso desierto. Ninguno de los grandes mercados se han salvado, con Alemania y Francia a la cabeza de los números rojos. En ambos mercados se vendieron 5.500 unidades menos.

El mercado alemán ha sido junto al francés y el polaco un auténtico lastre para los grandes fabricantes de tractores. En 2016 se inscribieron 28.746 unidades, un 10,8% menos que el año anterior y ya van tres ejercicios consecutivos de caídas. Buena muestra fue el mes de diciembre, en el que solo se llegaron a inscribir 1.940 tractores, casi la mitad que en 2015. El batacazo ha sido brutal en el segmento de más de 150 CV, donde se ha pasado de 11.987 a 9.046 unidades inscritas, un 24,5% menos. El único segmento que ha aguantado ha sido el de especiales entre 51 y 100 CV, donde las ventas se han incrementado un 1,5%, totalmente insuficiente para amortiguar la espectacular caída en las potencias más altas.

Por marcas, John Deere ha vuelto a liderar el mercado, aunque vendiendo mil tractores menos (5.222) y perdiendo un 1,3% de cuota hasta quedarse en el 18,2%. Le sigue Fendt, que también ha perdido un punto (16%) y Deutz-Fahr que completa el podio con un 9,5%. Importante subida para Kubota, que con sus 2.021 unidades consigue ganar un punto de cuota (7%), mientras que registra un descenso significativo Claas, que pasa de un 8,3 a un 7,1% de cuota, perdiendo por el camino más de 600 unidades.

El mercado galo tampoco se ha librado de un importante golpe después de un segundo semestre nefasto. Los indicadores ya lo hacían presagiar tras una primera parte del año marcada por la ley Macron, pero el descenso ha sido quizás mayor de lo esperado. El final de las ventajas fiscales y los precios de la leche han marcado un mal final de año que acabó con 22.426 tractores inscritos, un 9,2% menos que en 2015, en el que se habían vendido 24.698. La principal diferencia la encontramos en el mes de diciembre: mientras que el último mes de 2015 se inscribieron 5.366 tractores, en 2016 lo hicieron solo 3.531.

Aunque no hay cambios entre las primeras posiciones, sí que ha habido marcas que han sobrellevado mejor este mal año. John Deere conserva la primera posición en el ranking (17,6%), pero perdiendo más de un punto debido al aumento de inscripciones de los tractores especializados y a favor de aquellas marcas que inscribieron máquinas ante el cambio de legislación. New Holland se ha beneficiado con su T4 y T5 de las mayores ventas de tractores especializados hasta alcanzar el 16,5% (+0,5). El podio lo completa en Francia la marca Claas, perdiendo solo un 0,2% y cerrando el año en el 12,3%.

En el país vecino ha sido un buen año para Fendt (11,6% / +1,1) que tenía toda su gama a disposición de una red de concesionarios cada vez más profesionalizada, y también para Valtra (6,6% / +1,4), que ha podido comercializar durante todo el año las Series T y N. La otra marca del Grupo AGCO, Massey Ferguson, ha visto en cambio caer su cuota hasta el 9,8% (-1,2) debido a un periodo estival muy deficiente. Kubota ha sido, al igual que en Alemania, otra de las grandes sorpresas positivas y ha ganado 1,2 puntos hasta situarse en un 7,8%.

El titular podría haber sido de hundimiento absoluto del mercado italiano si no hubiera sido por un mes de diciembre (+19%) en el que llegó a tiempo la financiación asignada por los planes de desarrollo rural de la UE y marcado por las políticas de marketing aplicadas por los fabricantes y la red de distribuidores con incentivos para la compra antes de que finalizase el año. Según los datos dados a conocer por FederUnacoma, el número final registró un ligero descenso del 0,5% para los tractores con 18.341 unidades vendidas frente a las 18.428 en 2015, y del 0,6% en las cosechadoras combinadas con 343 máquinas vendidas en comparación con las 345 del año anterior. De hecho el mercado de maquinaria en el país transalpino solo creció en manipuladoras telescópicas y en remolque de ganado.

Los números del Reino Unido tampoco mejoran, situándose en los niveles más bajos de la última década. En 2016 se inscribieron 10.602 tractores, un 2,2% menos que en 2015, en el que se inscribieron 10.842 tractores. Los datos de la Asociación de Ingenieros Agrícolas ofrecen datos dispares entre los diferentes segmentos de potencia, con fuertes descensos en el apartado de 121-140 CV (-11%) y de 141-160 CV (-19%). A diferencia del resto de Europa los mayores incrementos se produjeron en las potencias más altas, entre 161 y 200 CV (+36%), el 12% del total. De cada cinco tractores registrados en el Reino Unido en 2016, uno tenía más de 200 CV. Estos números han hecho que la potencia media del tractor haya aumentado un año más hasta situarse en los 158,3 CV (+0,8%).

Polonia había sido uno de los países que mejor había aguantado el tirón de los últimos años y en que muchas marcas tenían puestas sus esperanzas. Lamentablemente 2016 ha mostrado otra cara totalmente diferente. En la primera mitad del año, las empresas (fabricantes, importadores, distribuidores) registraron una reducción significativa de las ventas, debido principalmente a la falta de subvenciones y subsidios de la UE, la disminución de los precios del cereal y a una preocupante sequía. Con un gran crecimiento del mercado de maquinaria usada, el número de inscripciones se frenó en 8.761, por los más de 12.300 del año anterior (-40%).

En el análisis por marcas, New Holland lideró el mercado de tractores polaco por octavo año consecutivo con 1.291 unidades registradas. Le siguieron John Deere, Zetor y Kubota.