COSE celebra en Galicia su jornada anual de fomento del asociacionismo

La Confederación de Organizaciones de Selvicultores de España (COSE) vivió los pasados días 2 y 3 de junio unas jornadas de sensibilización y formación encaminadas a fomentar el asociacionismo entre los propietarios forestales. Con la colaboración de la Asociación Forestal de Galicia (AFG), el patrocinio del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Viveiro, convocó un seminario sobre ‘Objetivos estratégicos de política forestal’.

En el acto estaban presentes presidentes de asociaciones forestales de numerosas regiones españolas, como Galicia, Asturias, País Vasco, Navarra, Cataluña, Castilla y León, Murcia… La plana mayor de la Confederación de Organizaciones de Selvicultores de España (COSE), la directora gerente de la Unión de Selvicultores del Sur de Europa (USSE) y el director general de Ordenación y Producción Forestal de la Consellería do Medio Rural de la Xunta de Galicia, entre otras personalidades, junto a casi un centenar de propietarios forestales gallegos.

Francisco Dans, director de la AFG, destacó en su exposición que “un selvicultor activo es aquel propietario forestal que gestiona su finca, con criterios de gestión forestal sostenible. Quien gestiona, invierte y arriesga, por lo que merece un reconocimiento social y el apoyo de la Administración”.

Lógicamente, en una visita que discurría por la franja norte de las provincias de Coruña y Lugo, no faltó en el programa una serie de visitas al monte y, en concreto, a varias plantaciones de eucalipto.

Allí la expedición organizada por COSE conoció de primera mano los modelos de selvicultura aplicados y la producción esperada por los gestores de las fincas, los protocolos de sanidad forestal seguidos y los sistemas de comercialización aplicados al producto.

“Galicia vive actualmente una fuerte expansión de las plantaciones de Eucalyptus nitens”, observó Francisco Fernández de Ana Magán, presidente de la Asociación Forestal de Galicia. “El nitens desplaza al globulus, seriamente afectado por el goniptero a partir de los 200 metros de altitud”.

Según AFG, Galicia acumula ya 4,5 millones de metros cúbicos de eucalipto nitens que “hay que colocar en el mercado”. En cuatro años habrá casi 5 millones de m³. Esta sobre producción hace pensar en una probable caída de los precios. “El sector va más rápido que la administración –advirtió Francisco Dans–. Este sector merece una política de estado para el medio rural. Una política basada en incentivos fiscales a la gestión forestal sostenible, inversión en infraestructuras adecuadas, un catastro bien hecho, fiscalidad universal y reconocimiento y estatus para los profesionales forestales Este escenario serviría para rejuvenecer el sector y poner en marcha el monte de Galicia y de España”.

“El presente y el futuro de Galicia pasa por el eucalipto”, afirmó rotundo Francisco Fernández de Ana Magán. “Existen 250.000 ha de masas puras de eucalipto, y 400.000 en total (puras y mixtas). En Galicia hay profundidad de suelo, llueve en verano, no hay heladas... Y el eucalipto tiene mercado en la industria papelera, también en carpintería, y viaja a Zaragoza, País Vasco, Portugal...”.

La expedición de COSE en Galicia concluyó en el monte Riobóo. En el año 1992 la propiedad encargó a la AFG la elaboración de un proyecto de ordenación con el fin de convertir la finca en una explotación forestal, y conseguir unas rentas periódicas suficientes a base de la producción de madera. Desde entonces, el equipo técnico de la AFG presta un servicio de asistencia a la gestión del monte.

El monte se divide en tres cuarteles productivos y uno de conservación. En dos de los productivos el pino radaita es la especie principal, diferenciados por la calidad de estación, y en el tercero la especie principal es pseudotsuga.

El manejo de la finca ha conseguido armonizar la producción forestal, la ganadería (utilizada ahora para mantener sin matorral las praderías que rodean las edificaciones) y la conservación del bosque autóctono, formando un sistema biodiverso muy bien integrado en un entorno natural equilibrado.

“La sociedad irá valorando el monte cada vez más, ganaremos visibilidad y mejorará la imagen y reconocimiento del sector”, explicó convencido Francisco Carreño, presidente de COSE. “El horizonte 2020 anuncia cambios trascendentales. Los recursos públicos financiarán los bienes públicos; y el monte genera muchos de estos recursos”.

El sector debe seguir trabajando para romper con muchos tópicos y estimular la economía primaria, que se ha ido perdiendo porque la gente se ha alejado del territorio. Para el presidente de COSE es fundamental incorporar a todos los propietarios forestales a esta dinámica asociativa, estimularles a que hagan una gestión de sus fincas. Y, por supuesto, hacer visible toda esta labor a la sociedad.

En el seno de ésta jornada de dos días por los montes gallegos, tuvo lugar la Asamblea General de COSE con los representantes de cada una de sus asociaciones miembro. Además de analizar los aspectos propios que requiere la naturaleza de este tipo de reuniones en cuanto a funcionamiento, se reflexionó sobre las prioridades en materia forestal que existen en cada región para perfilar las líneas estratégicas de COSE y las acciones a desarrollar.

Entre ellas cabe destacar la necesidad imperiosa de seguir luchando por unos incentivos fiscales a la gestión forestal sostenible como el mayor estímulo para atraer la inversión y evitar el abandono de los montes, asociado a un plan contable sectorial para esta actividad. Asimismo, COSE pide una equiparación del Impuesto de Sociedades de las personas jurídicas al tratamiento fiscal de las personas físicas para rendimientos procedentes de aprovechamientos forestales y el mismo beneficio fiscal que gozan las SOFOR en la Ley 21/2015, de 20 de julio, por la que se modifica la Ley 43/2003, de 21 de noviembre, de Montes (Disposición adicional decimotercera. Deducción en el Impuesto sobre Sociedades por gastos e inversiones de las sociedades forestales).

Francisco Carreño, presidente de COSE.

También activar los contratos territoriales, una línea de asesoramiento específico para lo forestal dentro de los PDRs (ahora sólo lo tiene el asesoramiento agrícola-ganadero), trabajar por el estatus de selvicultor activo para equipararle al agricultor a título principal o agricultor profesional, reconocimiento expreso de los sumideros de carbono de los montes privados para la mitigación del cambio climático y compensación de emisiones en los acuerdos de París (COP21), impulso a la gestión activa y las plantaciones productivas unido a la promoción de la madera, estudio de un modelo de valoración de las externalidades positivas con reflejo en la fiscalidad y el PIB, trabajar en unos indicadores socioeconómicos fiables y concretos de la selvicultura que sirvan de referencia y base para el desarrollo de planes, iniciativas y proyectos forestales.

En cuanto a la sanidad forestal, es importante para COSE incidir en el registro de los productos fitosanitarios para autorizar aquellos que pueden controlar las plagas y enfermedades de mayor afectación en las masas forestales, como es actualmente la procesionaria del pino.

Respecto a la legislación y normativa de conservación de la naturaleza, COSE viene trabajando en cómo afecta su implantación en el día a día de la gestión, intentando salvar los escollos de la Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad recientemente aprobada y la normativa de la RN2000, sin olvidar que los hábitats más preciados no hubieran llegado hasta nuestros días sin la gestión que los propietarios han ido realizando, el camino más eficiente para conservar la naturaleza.

Para finalizar, se concluyó que es necesaria una mayor comunicación para acercarse al público en general y que éste entienda la labor fundamental del selvicultor en el mantenimiento y conservación de los bosques y en los bienes y servicios que provee a la sociedad con la dedicación, esfuerzo y amor a la tierra.