La ETSEAMN acoge el XXXIII Congreso Nacional de Riegos organizado por la Asociación Española de Riegos y Drenajes
La Escola Tècnica Superior d’Enginyeria Agronòmica i del Medi Natural (ETSEAMN), perteneciente a la Universitat Politècnica de València (UPV), acoge el XXXIII Congreso Nacional de Riegos, que se celebra del 16 al 18 de junio. El Congreso, organizado por la Asociación Española de Riegos y Drenajes en colaboración con la ETSIAMN, reúne anualmente a investigadores y empresas relacionadas con el regadío. Bajo cuatro ejes principales, Agrohidrología, Calidad del Agua, Modernización del Regadío y Gestión del Riego, el Congreso tiene el objetivo de exponer y compartir los últimos avances en este campo.
Como explica Álvaro Royuela, secretario local del Congreso, “los retos que continua planteando el regadío como son asegurar la garantía alimentaria futura en una población mundial en crecimiento, la sostenibilidad económica y ambiental de la actividad mejorando la eficiencia en la utilización del agua, y la resolución de nuevos problemas como el energético y la modificación de las tarifas eléctricas aplicadas al riego que ha llevado a los agricultores a situaciones límite, provoca que el intercambio de experiencias y nuevos conocimientos que se aportan en este Congreso sigua siendo clave”.
El Congreso contará con diferentes ponencias que se enmarcarán dentro de estos cuatro ejes básicos, y una ponencia inaugural, a cargo de Daniel Sala, titulada Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia: Patrimonio de la Humanidad.
En la Comunidad Valenciana prácticamente se riega la mitad (43%) de las más de seiscientas mil hectáreas que constituyen las tierras de cultivo. Este porcentaje dobla la media española (21%) y la sitúa en segundo lugar en términos relativos, solo por detrás de Canarias (56%).
El regadío valenciano prácticamente está monopolizado por especies leñosas. La especialización citrícola de la agricultura valenciana, con sus más de 150.000 hectáreas, es mundialmente conocida. Esta realidad no esconde la importancia de otras producciones de menor extensión pero trascendentales por su concentración en determinadas comarcas. Es el caso del caqui (11.700 ha), los frutales de hueso (7.800 ha) o el granado (3.600 ha). También son importantes las transformaciones en riego de cultivos de secano como el viñedo para vinificación (18.000 ha), olivar (15.000 ha) y almendro (5.700 ha). Fuera de los cultivos leñosos destaca la producción tradicional de arroz en el entorno del Parque Natural de la Albufera de Valencia con más de 15.500 ha.
De este modo, la agricultura de regadío aporta en la Comunidad Valenciana tres cuartas partes de la Producción Final Agraria, siendo la base de una cadena agroalimentaria que alcanza a aportar hasta una quinta parte de la riqueza regional. Su gran vocación exterior, conjunción de producción de alta calidad y gran dinamismo empresarial, sitúa a las exportaciones agrarias en el segundo lugar en la balanza comercial exterior de la Comunidad Valenciana.
En conclusión, en este territorio confluyen regadíos milenarios y de nueva implantación; sistemas de riego tradicionales e infraestructuras altamente tecnificadas; producciones consolidadas y cultivos emergentes, por lo que es un marco perfecto para la celebración de un foro de la solera y el prestigio como el Congreso Nacional de Riegos en su edición número XXXIII.