El mundo de la Agricultura está frente a una nueva revolución
“El mundo de la agricultura está afrontando una etapa histórica dictada por el profundo cambio que se está llevando a cabo, incluso debido al perdurar de la crisis económica global, que exige a las empresas agrícolas un nuevo estilo de trabajo y de gestión, alterando reglas que hasta ahora se habían considerado inmutables”. Este es el comentario de Lucia Salmaso, consejero delegado de la sede europea de BKT, uno de los referentes del mercado de los neumáticos Off-Highway (Fuera de Carretera), que cuenta con una facturación en el sector agrícola de 617 millones de dólares, equivalente al 65% de los 950 millones totales, alcanzada gracias a la venta realizada en 130 países en el mundo. “Se están rediseñando los confines de la agricultura, estableciendo nuevos caminos agronómicos, introduciendo perentoriamente el concepto de competitividad de la empresa agrícola, con la necesaria creación de nuevas figuras profesionales especializadas, como es el subcontratista”.
Actualmente cada agricultor tiene que ser capaz de aumentar la producción y la rentabilidad de su propia empresa. Con el aumento mundial de la demanda de productos alimenticios y la exigencia improrrogable de trabajar los terrenos con un menor impacto ambiental, el subcontratista es la única figura cualificada capaz de competir en un ambiente cuya creciente complejidad requiere una fuerte especialización y capacidad de innovar. Las empresas agrícolas que recurren a servicios de subcontratación son unas 534.000, equivalente al 33,4% de las empresas totales. En las Cámaras de Comercio son más de 31.000 las empresas inscritas como subcontratistas y entre estas más de 18.000 son empresas agrícolas que llevan a cabo una o varias fases de la elaboración de los terrenos para terceros utilizando medios mecánicos propios (fuente Nomisma).
“Para los fabricantes de neumáticos, el subcontratista es un interlocutor importante ya que presta una debida atención a la elección del neumático, siendo un importante factor que incide en los costes y contribuye en la determinación de la productividad de un cultivo y en el estado de salud de un terreno, además de favorecer el menor consumo de carburante de la máquina, reducir los tiempos de parada y permitir que dure más.
La natural evolución a la que estamos asistiendo en el mundo agrícola nos propone la imagen de un sector que está lenta pero radicalmente cambiando su identidad y dirección”, concluye Lucia Salmaso. “No olvidemos que la agricultura es un sector fundamental en términos dimensionales, económicos y financieros a nivel mundial que asumirá un papel cada vez más central, por lo que la subcontratación representa la verdadera clave para garantizar y tutelar el futuro”.