La prohibición de Fipronil deja al sector productor de semillas sin alternativas para tratar las plagas en maíz y girasol
22 de julio de 2013
La Asociación Nacional de Obtentores Vegetales (Anove) alerta de la importante pérdida de producción que tendrán que soportar los agricultores españoles tras la prohibición por parte de la Unión Europea del uso del insecticida Fipronil en semillas de maíz y girasol. Desde Anove se ha agradecido la intervención del ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), Miguel Ángel Arias Cañete, a favor de una toma de decisiones basada en criterios científicos, así como la votación en contra de la propuesta hecha desde Bruselas, la cual se entiende desde la asociación como precipitada y desproporcionada.
“Pero a la vez pedimos al MAGRAMA un mayor esfuerzo para impulsar un escenario adecuado que asegure y proteja la actividad de las empresas productoras de semillas, en el que se tengan en cuenta criterios científicos en la toma de decisiones, y se analicen profundamente el impacto de las decisiones que se tomen desde la Administración”, comenta Antonio Villarroel, secretario general de Anove.
Tras la prohibición en abril de este mismo año de tres insecticidas neonicotinoides, ahora se une un veto más a la única alternativa que existía en nuestro país para el tratamiento de semillas para cultivos, como son maíz y girasol. Según Antonio Villarroel, “sin alternativas factibles, nos encontramos ante un escenario realmente preocupante, puesto que a partir de la próxima campaña los productores de semillas no contaremos con ningún insecticida para luchar contra plagas en estos cultivos, lo que repercutirá negativamente en la producción del agricultor, que se verá gravemente reducida, tanto en calidad como en cantidad”.