CT desarrolla FlightSafe, un sistema automatizado por luz UV-C para la desinfección del interior de las aeronaves comerciales
La empresa de ingeniería CT ha desarrollado FlightSafe, un sistema automatizado de desinfección por radiación a corta distancia, a partir de luz UV tipo C para el interior de las cabinas de las aeronaves comerciales. Este vehículo autónomo está equipado con un sistema de brazos plegables, dotados de unas lámparas que emiten luz ultravioleta en una frecuencia en la que se ha demostrado su eficacia como desinfectante.
Este vehículo autónomo es capaz de desplazarse por el interior de la cabina del avión e iluminar de cerca los distintos elementos de la cabina como asientos, brazos, mesita, suelo o puertas del maletero… a través del movimiento y la rotación de sus brazos.
Imagen virtual de FlightSafe, el sistema automatizado que, gracias a la exposición corta de luz ultravioleta, actúa de desinfectante en el interior de los aviones comerciales.
Luis Flores, director de la unidad de negocio Engineering Manufacturing de Sevilla, explica que “desde CT somos plenamente conscientes de que la seguridad y la salud de los viajeros y del personal a bordo son primordiales para la recuperación del transporte aéreo. El proyecto surgió en un laboratorio de ideas que creamos en CT, en el contexto de la pandemia. Durante varios meses trabajamos en este sistema que viene a automatizar el proceso de desinfección con una tecnología segura y que se adapta perfectamente al espacio de la cabina y a la corta duración de las escalas. Por ahora, acabamos de solicitar su patente y esperamos desarrollarlo en breve”.
Entre sus ventajas, destaca la rapidez y la autonomía del proceso, lo cual permite reducir los tiempos de escala de las aeronaves, ya que actualmente el proceso de desinfección se realiza de forma manual, con el consiguiente riesgo para el personal de limpieza. Además, se evita la exposición por parte de operarios, tripulación y pasajeros a la luz UV-C que, a su vez, puede ser perjudicial.
En el proyecto CT colaboran instituciones como la Universidad de Sevilla (AICIA), que aporta la plataforma móvil, y el CSIC (Centro Superior de Investigaciones Científicas), que a través del CNB (Centro Nacional de Biotecnología) es responsable de proporcionar los parámetros de operación y certificar el proceso de desinfección mediante luz UV-C. Aunque el sistema está diseñado para el sector aeronáutico, su funcionamiento y tecnología podrían adaptarse a cualquier otro medio de transporte como, por ejemplo, el ferroviario.